Género y Sexualidades en la UAHC
Desde los inicios de la Academia en el año 1975, nuestra institución ha buscado generar pensamiento crítico y aportar al debate y difusión de conocimientos sobre la realidad política, económica, social y cultural de nuestro país. Antes de convertirse en Universidad, el conjunto de centros de estudios que constituían la Academia estaban ligados entre sí a partir de investigaciones comunes y de la implementación de programas de desarrollo y capacitación para distintos sectores sociales.
Dentro de las primeras vinculaciones desarrolladas por la Academia, fue la entrega de patrocinio al El Círculo de Estudios de la Mujer. Este Círculo fue un espacio orientado al análisis y difusión sobre la realidad y condición de las mujeres chilenas y latinoamericanas, manteniendo un funcionamiento activo entre los años 1979 y 1983. A partir de esta experiencia, el Círculo promovió la realización de diversas actividades y la publicación periódica del Boletín y de una serie de Cuadernos del Círculo, ambos con temáticas de interés feminista. Confluyó en el Círculo la rearticulación del Movimiento Feminista, que comenzaba a movilizarse en contra de la dictadura de Augusto Pinochet.
En 1983, el Círculo dejó de existir como tal y de esta experiencia y colectividad surgen la Casa de la Mujer La Morada y el Centro de Estudios de la Mujer (CEM), ambas organizaciones feministas dedicadas, hasta la actualidad, al desarrollo de la investigación e intervención sobre las diversas realidades de las mujeres y en torno a las desigualdades que las afectan. Dentro de las precursora del Círculo de la Mujer, se destaca la participación de Julieta Kirkwood, quien dentro de sus muchos aportes, formuló e implementó un programa docente de orientación feminista.
Estos antecedentes en el origen de nuestra Universidad, nos permiten comprender que, a lo largo de su historia, la misión de la Academia ha acogido el valor por la apertura y producción permanente de pensamiento crítico frente a las hegemonías, las desigualdades y exclusiones de todo tipo, como las basadas en el género, la raza y clase social.
Una vez constituida la Academia como proyecto Universitario, se desarrollaron distintas iniciativas para integrar y promover la formación universitaria con perspectiva de género. Esta fue adoptada como dispositivo analítico y problematizador de las relaciones de poder que determinan las relaciones sociales, perpetuando desigualdades que están a la base de las distintas formas de violencia, y que devienen de la imposición de una matriz sexo-genérica heteronormativa, de clase y racializada.
Entre los años 1998 y 2008, la Universidad contó con el Programa Pro-Género, que desarrolló investigaciones y publicaciones especialmente dedicadas a las temáticas de género, sexualidades y feminismo. Este programa, reunió a un equipo interdisciplinario de docentes, profesionales y graduadas, que entregaron sus aportes a través de los módulos de formación de magíster y postítulo, además de variados espacios de extensión académica.
Existe también a nivel de pregrado, dentro del plan de formación general transversal para todxs lxs estudiantes de la UAHC la Cátedra Básica “Género, Derechos Humanos y Multiculturalidad” en cuyos contenidos se trabajan de manera específica aspectos relativos a la perspectiva de género. También, dentro de los programas y planes de estudio disciplinares de pregrado, se entregan contenidos relativos a la perspectiva de género, teoría feminista, epistemologías y metodologías feministas, abordajes sobre la violencia de género y sexual, y tesis y tesinas realizadas en estas líneas. Junto con lo anterior, en los últimos años han existido diversas iniciativas estudiantiles que promueven una visión crítica de la educación sexista, levantado acciones y debates en coordinación con colectivos de otras instituciones en torno a la violencia sexual y de género al interior de los espacios académicos y universitarios.
A pesar que los debates de género y feminista se hayan dado de manera discontinua en la historia de la UAHC, la institución mantiene el compromiso por establecer, de manera estructural y orgánica, una instancia de problematización y análisis de las desigualdades sexo-genéricamente situadas. Ello en el entendido que las desigualdades están condicionadas por una cultura patriarcal que las naturaliza y que legitima relaciones de poder entre los géneros y las sexualidades. Estas cuestiones a menudo se expresan y materializan como violencia de género y sexual, y como obstrucción y exclusión de las oportunidades de acceso a la educación, mejora en las condiciones laborales, de salud, entre otros ámbitos sociales.
En este contexto, con fecha 6 de junio del año 2017 el Consejo Superior Universitario (CSU) aprobó por unanimidad la moción presentada por el actual Rector Pablo Venegas, de dar inicio a la denominada Unidad de Género y Sexualidades (UGS). Junto con la creación de esta instancia, el año 2018 se impulsó y aprobó la instalación de la Dirección de Justicia Social, Igualdad e Inclusión, dentro de la cual se aloja la Unidad de Género y Sexualidades, junto con otras tres unidades: Unidad de Promoción y Desarrollo Indígena, Unidad de atención a la Discapacidad y Unidad de Inclusión Social para la Permanencia.
Con esta nueva Dirección, que alberga a la UGS, nuestra Universidad avanzó decididamente en potenciar de manera institucional y orgánica hacia el abordaje de las brechas, desigualdades y eliminación de toda forma de discriminación dentro de la comunidad universitaria, sean estas por razones de género, clase o etnia; en particular desde la perspectiva de la UGS plantearnos de manera crítica al ejercicio de prácticas sexistas, que reproducen y cronifican las desiguales y las violencias y que muchas veces de manera implícita son legitimadas dentro de los discursos universitarios.
Por otro lado, estos nuevos espacios en la institución, vienen a reforzar el sello distintivo de la universidad en materias de derechos humanos, ampliando y profundizando esta mirada hacia estos otros ámbitos, avance que es posible gracias al resultado del conjunto de acciones y experiencias aportadas por el cúmulo de iniciativas previas desarrolladas en la UAHC a lo largo de su historia.
Por cierto, desde el afuera de la UAHC, son los movimientos sociales de la última década, quienes han promovido y amplificado estos cuestionamientos, aportando a que el país y las diversas instituciones educativas, se movilicen hacia una profunda reflexión sobre cómo se reproduce y ejerce la violencia patriarcal. Ya desde las movilizaciones estudiantiles del año 2006 y con más fuerza desde el 2012 vienen incluyendo dentro de sus demandas de una Educación, gratuita, pública y de calidad; la demanda específica por una Educación No Sexista.
Estos cuestionamientos y demandas sociales, constituyen una muestra de que las universidades, entendidas como espacios de reflexión crítica por excelencia, se ven en la obligación en aportar en la generación de conocimiento y colaboración en la resolución de los problemas que afectan al país, proponiendo estrategias para visibilizar y promover nuevas prácticas y relaciones sociales protegidas y libres de violencia sexual, de género y de toda forma de dominación, exclusión y discriminación propia de sociedades patriarcales.
A continuación, presentamos dos documentos, el primero es el “Marco comprensivo para el abordaje de la Violencia Sexual y de Género en la UAHC” y su objetivo es proveer a la comunidad universitaria de una gama de argumentos que permiten comprender cómo opera el fenómeno de la violencia sexual y de género al interior de la institución y vida universitaria; el segundo documento es el “Protocolo para la actuación institucional frente a la Violencia sexual y de género en la UAHC”. Evidentemente, ambos textos están en diálogo y son complementarios entre sí; siendo el primero una herramienta teórica, conceptual y política que posiciona a nuestra universidad en un planteamiento crítico de las consideraciones que se han elaborado acerca de este fenómeno y problema social de la violencia sexual y de género. El segundo, enfatiza un carácter más técnico e instrumental, siendo una herramienta institucional para actuar sobre los casos de violencia sexual y de género que se denuncien formalmente en nuestra universidad de manera oportuna, justa y cuidando sobre todo el debido proceso para quienes se vean involucrados en situaciones de esta naturaleza.
EQUIPO
UNIDAD DE GÉNERO Y SEXUALIDADES
DIRECCIÓN DE JUSTICIA SOCIAL, IGUALDAD E INCLUSIÓN
Diciembre 2018