Amilcar Borges docente, actor, director e investigador teatral; Valeria Radrigán, actriz de la Universidad Católica de Chile, Doctora en Filosofía mención Estética y Teoría del Arte, Universidad de Chile y Marcos Guzmán, docente de actuación en las universidades Mayor y Academia de Humanismo Cristiano se dieron cita en el conversatorio Nuevas Fronteras Creativas en las Artes Escénicas.

En la instancia,  realizada en el marco del Festival de Teatro Nuevas Fronteras Creativas, organizado por nuestra Escuela de Teatro y el Centro Cultural Balmaceda Arte Joven, se abordaron algunas de las nuevas líneas de investigación y creación de la escena del teatro contemporáneo.

Precisamente entendiendo el contexto de este Festival,  que habla sobre el nuevo lenguaje y la nueva escena teatral chilena,  para los invitados  el concepto “nuevas fronteras” debiera significar un rompimiento con lo que se podría decir antiguas fronteras. “La diferencia debiera darse en los procedimientos de articulación y construcción de los procedimientos de creación escénica, los que están casi en un 90 por ciento relacionados en una construcción fetichista de la creación de obras, donde los procedimientos son obviados y está preestablecido el público objetivo, el lugar y con una estructura muy funcional. Si nuevas fronteras se sostiene sobre las mismas formas que antiguas fronteras, deja ciertas dudas. Pero si hay una cierta revisión, una aprehensión hacia los procedimientos de creación a nivel interdisciplinarios empieza a surgir determinados límites a la hora de enfrentar procesos de creación como procesos de construcción del lenguaje, y desde ahí, surgen determinados acentos y problemáticas que son interesantes para la dimensión escénica refiriéndose no solo al teatro”, sostiene Amilcar Borges.

En lo referido al teatro y específicamente a la disciplina teatral “pura”,  para los invitados esta no existe como tal, pues siempre se entrelaza con el movimiento, con el texto, el lenguaje, con la musicalidad y el ritmo, al igual que otras disciplinas del arte, que se entrelazan con la plástica, la literatura, la danza, entre otros.

“Cada una de las disciplinas están mediadas por una u otra, el teatro tiene parámetros que lo definen en su esencia, pero siempre se va a cruzar y complementar con otra disciplina. Pero para hablar del teatro, es mejor abordarlo desde los procesos de formación, desde la estética, el canto, las metodologías de enseñanza y aprendizajes desde la división sistémica y relacional, donde cada una hace y desarrolla un área determinada en el arte, donde la “disciplina” se ajusta a todos los formatos del sistema político y social, dejando una cierta tendencia a amplificar los limites disciplinares del teatro, de manera que este recupere su definición social y se articule con otras disciplinas que han estado invalidadas en el proceso formativo, como por ejemplo la performance, el circo, la escultura, la fotografía, entre otras, y que se inscriban en el universo académico que conlleva indudables ciclos de enseñanza y aprendizajes, desde ese escenario entender cuáles son los procesos de enseñanza –aprendizaje que están configurando la noción de “disciplina teatral”, agrega Borges.