Charla sobre Poder Judicial y medios Mónica González y juez Daniel Urrutia advierten sobre “deriva autoritaria” que enfrentan las instituciones chilenas

Charla sobre Poder Judicial y medios Mónica González y juez Daniel Urrutia advierten sobre “deriva autoritaria” que enfrentan las instituciones chilenas

La rectoría de la UAHC organizó el conversatorio “La relación entre el Poder Judicial y los medios en la era de la desinformación”, un encuentro en el que referentes de ambos ámbitos plantearon una reflexión al público asistente sobre el contexto, impacto y alcances de la jurisprudencia que rodea el ejercicio de la prensa en nuestro país.

En la ocasión la periodista Mónica González destacó ciertos avances en la situación del poder judicial en Chile desde los tiempos de la dictadura, pero también señaló que en algunos aspectos la situación no ha progresado tanto como debería. En su ponencia estableció el contraste que produjo entre los magistrados que, pudiendo intervenir en causas emblemáticas de violaciones a los derechos humanos, optaron por no hacer nada, frente a los que se involucraron en la defensa de la vida de aquellos/as que eran víctimas de una persecución por parte de agentes del Estado.

En la actualidad, considera, existe un nivel extendido de apatía que permite la cooptación de ciertos poderes, refiriéndose a las revelaciones más recientes en torno a la trama de escándalos que han expuesto a la industria del retail. “Todo el mercado sabía lo que estaba pasando y lo dejaron ser así. Esto muestra que estamos frente a un problema de ignorancia, donde no nos importa que nos hagan imbéciles. El problema de fondo es que tenemos un poder judicial cooptado donde los funcionarios honestos deben lidiar con los corruptos”, expresó la profesional que recibió el Premio Nacional de Periodismo 2019.

En un contexto de proliferación de las noticias falsas, la autora y coautora de libros como “Los secretos del imperio de Karadima” (2011), “La conjura: los mil y un días del golpe” (2012) y “La gran estafa: Cómo opera el lucro en la educación superior” (2014) advirtió que si bien la ubicuidad e inmediatez de este fenómeno lo hacen parecer como un desarrollo reciente, las distorsiones informativas deliberadas vienen desde hace mucho tiempo, citando como ejemplo la operación de propaganda para encubrir los asesinatos cometidos durante la operación Colombo, donde la prensa de la época contribuyó a la campaña de desinformación con titulares como el infame “Exterminados como ratones” publicado por el diario La Segunda en 1975.

Poderes fácticos criminales

Por su parte, el Juez del Séptimo Juzgado de Garantía de Santiago, Daniel Urrutia tendió una conexión directa entre los que describió como crímenes del pasado y aquellos que se registran en el presente, concentrando su análisis en la forma como el crimen organizado, que se nutre gracias a los paraísos fiscales, aprovecha las debilidades institucionales para socavar esferas del poder judicial o del sistema penitenciario. “Nos encontramos con estos poderes fácticos criminales que subvierten la democracia, carteles que deben ser vistos como un reservorio de la élite abusiva. Lo que antes uno pensaba que no ocurría en Chile ahora se está dando aquí, en Brasil y en buena parte de Latinoamérica. Habría que generar una narrativa que devele las estructuras criminales que se ocultan tras los carteles económicos”, propuso.

El abogado de la Universidad de Chile también se refirió al ámbito de la prensa y su relación con el poder judicial, donde según su experiencia los medios de comunicación contribuyen a un reforzamiento de prejuicios sobre un segmento considerado marginal (pobres, manifestantes, mapuches) y se genera un reforzamiento de la “deriva autoritaria” que se ha visto a partir del 18-O. “Los medios pertenecen a alguien que tiene una agenda, pero pese a eso alegan una objetividad que no tienen. Por otra parte, es cierto que tenemos una justicia para ricos y justicia para pobres. Estamos frente a un poder contra mayoritario donde se ha vuelto al ideal portaliano a favor de la élite que abusa del poder. El poder judicial replica esta estructura”, planteó el magistrado y crítico activo de las responsabilidades tras las lesiones oculares de manifestantes ocurridas durante el estallido social.

Junto con coincidir en algunos puntos y discrepar en otros propuestos por el juez Urrutia, Mónica González llamó a hacer un reconocimiento de la excelente labor que algunos/as jueces y periodistas han llevado a cabo sin importar sus afinidades ideológicas, identificando la corrupción ligada a los grandes grupos económicos como la principal amenaza que enfrentan actualmente nuestras instituciones. “Nuestras leyes están llenas de forados y no podemos seguir ignorándolos, porque esos forados son nuestro mayor infierno, como ocurrió con el pacto para defender a la clase política cuando se destapó el financiamiento irregular. Hay criminales por todos lados gracias a la cooptación, pasó en México y en El Salvador y nos encaminamos a esa misma dirección si no frenamos este proceso. Este no es un problema de izquierda o derecha, hay buenos periodistas en La Tercera y El Mercurio y buenos jueces. No hay que hacer una generalización. De nosotros depende que los jueces y los periodistas cumplan con su tarea. Estamos frente a una arremetida autoritaria y la ética es clave para defendernos”, argumentó.

Revisa imágenes de la actividad en esta galería:

La relación entre el Poder Judicial y los medios en la era de la desinformación-04