El coronavirus como una oportunidad de coexistir_Docentes de la UAHC dialogan sobre cómo lidiar con emociones complejas durante el confinamiento
Con la exposición principal del académico y psicólogo de la UAHC Patricio Alarcón, se llevó a cabo la charla virtual “El coronavirus como una oportunidad para reforzar la vocación de coexistir”, organizada por la Escuela de Educación Diferencial, la Dirección de Vinculación con el Medio y el Centro de Mediación Psicopedagógica Integral (CEMPIN).
En la oportunidad el docente y especialista reflexionó junto a las académicas de la Escuela de Educación Diferencial, Caroline Contreras y Marcela Arévalo, sobre cómo convivir positivamente con los cuadros emocionales más recurrentes durante la crisis sanitaria como son el miedo, la tristeza y la angustia. Asimismo, el docente se refirió al tema de señalar el coronavirus como una oportunidad de reforzar la coexistencia y la vocación de coexistir.
“No hay nada más terrible para el ser humano que la soledad. También se puede estar en soledad acompañado, pero la soledad es considerada también el estado que genera más enfermedades, ya que cualquier enfermedad catastrófica en soledad es mucho más grave. Ante eso hemos planteado el tema de la coexistencia que es lo que hoy está llamando la atención, ya que tenemos que tomar distancia. Las idea es tomar esto desde la otra cara de la moneda”, señaló Alarcón.
Las emociones son positivas
En un ejercicio de interacción, los asistentes a la charla manifestaron que por estos días, los cuadros emocionales que más padecen son angustia, tristeza y miedo ante la incertidumbre. Al respecto, el psicólogo aseveró que las emociones son todas positivas. “Aunque cueste creerlo eso es así. Son positivas pues son biocéntricas, es decir, están dirigidas hacia la vida. Uno tiende a confundir emociones con sentimientos y eso es distinto. Por ejemplo la tristeza es una emoción que nos permite calmar los dolores”, explicó Alarcón.
Agrega que lo que nos aflige en algún momento, eventualmente puede ser aliviado por la tristeza y que, en lugar de “encerrarnos en este estado”, suele llevarnos hacia escenarios negativos de mucha presión. “Hay que evitar que las emociones se transformen en sentimientos ya que eso produciría un estado más delicado”, recomendó en la cita a cuyo registro puede accederse en el siguiente link.