El desafío de hacer gobierno: ¿las obvias tensiones de una nueva etapa?
Joaquín Lavín ganó su apuesta: su candidata le ganó a la encuesta del Centro de Estudios Públicos (CEP), obteniendo más del 20%. Pasó a segunda vuelta, cuestión que también no estuvo en la dirección del CEP, el cual insinuó que Michelle pasaría el 50% eligiéndose en primera vuelta en presidenta de la República.
MEO, logró instalarse como la tercera fuerza, hecho que estuvo muy por debajo de las expectativas iníciales, donde se suponía que pasaría a segunda vuelta y si eso no fuese posible, por lo menos terminaría más cerca de la segunda mayoría (Evelyn Mathei) y más lejos de su más cercano competidor (Franco Parisi), quien le pisó los talones. Su plus, hoy, es el Partido PRO, su Fundación, unos alcaldes y concejales y un amigo diputado electo en Arica. Además, tres Consejeros Regionales.
Sfeir pareciera ser el que logró mayores estridencias, sin perjuicio de su 2,35%. Permitió visibilizarse como una persona que tiene una idea de sociedad en el marco del respeto del medio ambiente, como también visibilizar una vez más el ‘hecho ambiental’, que para algunos es un tema de gestión, mientras que para otros es un tema político. Quedará ver cómo avanzan el Partido Ecologista y Sfeir.
Roxana Miranda, más allá de su 1,27% de votación, irrumpió mediáticamente desde la plataforma que se le permitió institucionalmente, con un discurso de la ‘rabia popular’ planteando un giro radical del sistema político y económico. Interesante es constatar cómo una expresión genuinamente popular se posiciona en un espacio, que antes de esto no tenía cobertura alguna. El partido Igualdad, el soporte instrumental de estas ideas, tiene un largo camino que recorrer. Interesante será conocer cómo se proyecta. Muchas plataformas fracasan en el intento, otras triunfan.
Ricardo Israel, el que tomó las banderas de la regionalización como eje articulador de su discurso y propuesta, no tuvo el eco esperado en regiones (sólo un 0,57% de votos), pero por lo menos sacó ocho Consejeros Regionales. No deja de llamar la atención, que un electorado regionalista, haya tenido tan poca insinuación hacia esta candidatura. ¿Será que las propuestas de las primeras cuatro mayorías en materia de regionalización y descentralización satisfacen al electorado de regiones? ¿O en regiones no le creen a los que dicen ser regionalistas?
Marcel Claude, quien recoge con nitidez y consistencia (producto de su experiencia profesional y política) las banderas de la renacionalización de los recursos naturales y el fin de los abusos hacia ciudadanas y ciudadanos propinados por las AFP y las ISAPRES pasando por la banca, extrañamente, como ya lo constató la izquierda extraparlamentaria de años anteriores, incluido el Partido Comunista de Chile, no concitó el interés de un electorado, que una vez más, sin perjuicio de la baja de participación electoral -que estuvo cerca del 50% de los que se encuentran habilitados para votar-, privilegió las convencionales fuerzas políticas del vigente sistema político nacional.
Michelle Bachelet, como era de esperar, ganó con una gran distancia, más de 20% respecto de su más cercana competidora, hecho que ya la sitúa como la más probable próxima Presidenta de Chile, superada la segunda vuelta. El ganar como ganó, evidencia y reafirma todo lo que se escribía de ella: gran carisma, capacidad de aglutinar fuerzas políticas de diverso signo, no sólo al Partido Comunista, MAS y la Izquierda Ciudadana, sino que ser comprensiva de las señales que entregó y sigue entregando la Geografía de la Multitud, cuestión que cristaliza en la figura de Giorgio Jackson, diputado recién electo.
Entre los múltiples desafíos que debe abordar la probable próxima Presidenta se encuentra, el cómo lograr una síntesis adecuada en la conformación del gabinete y, gobierno en general, que le permita administrar lo que se viene. La última elección, generó resultados que dejan ‘incomodidad’ y ‘satisfacción’ a los socios partidistas más relevantes.
Por una parte, una Democracia Cristiana que tiene una sangría electoral que ya comenzó en la década de los 90’ (sin perjuicio del repunte de votación en diputados), y que hoy muestra una herida simbólica significativa: la no reelección de Soledad Alvear. Esta circunstancia, no implica razonar linealmente como que ya cayó la DC del arco del poder.
Por otra parte, un Partido Socialista, que si bien, en el número general en rendimiento electoral sale bien proyectado, ve caer a dos de sus senadores emblemáticos, como son Pedro Muñoz y Camilo Escalona. Este último, clave en la articulación del eje histórico de la Concertación, esto es, DC y PS. Carlos Montes, se presenta para algunos, como el siguiente relevo estratégico en el PS. Ello debe ser contrastado con los ajustes internos del partido en términos de tendencias.
Por otro lado, un siempre hábil negociador Partido Radical Socialdemócrata, también arrastra una crisis, la que puede ser centrada en su emblemático presidente José Antonio Gómez, quien en la Primaria de la Concertación, se vació de capital político a tal punto que fue inviable posicionarlo en una repostulación al Senado.
El PPD por su parte, en el reacomodo de sus fuerzas internas, donde pareciera ser que el girardismo se reinstala, buscará la presencia correspondiente en el gobierno.
El Partido Comunista, que con habilidad envidiable, logró una capitalización simbólica, en cuanto poseedor de la renovación de la política en sus estructuras institucionales (Cámara de Diputados) con la elección de sus más preciadas líderes juveniles (Karol Cariola y Camila Vallejos), tiene también una capitalización real, dado que se crea la bancada comunista en la Cámara. Capitalización, también en el mundo local y regional, sea con alcaldes/concejales y consejeros regionales, respectivamente.
Esta síntesis, llámese, ‘conformación de gobierno’, que debe realizar la más probable próxima Presidenta a la luz de los resultados de las elecciones, a todas luces deberá reflejar las tensiones obvias y esperadas al interior de la Nueva Mayoría, al interior de las tendencias intrapartidarias y el comportamiento de la Geografía de la Multitud que emana con regularidad temporal y heterogeneidad espacial.
*Docente Escuela de Ciencia Política y Relaciones Internacionales U. Academia de Humanismo Cristiano.
Articulo publicado en El Quinto Poder