En el marco del Día Nacional del Trabajador Social_Leonardo Moreno: “Un tercio del país está entrando y saliendo de la pobreza”
El director ejecutivo de la Fundación Superación de la Pobreza, Leonardo Moreno, valoró la medición multidimensional que se está realizando, pero lamentó que no se plasme en las políticas públicas.
En el marco de los festejos por el Día Nacional del Trabajador Social, la Universidad Academia de Humanismo Cristiano contó con la presencia de Leonardo Moreno, director ejecutivo de la Fundación de Superación de la Pobreza, quien expuso sobre “Pobreza en el Chile actual: Desafío para las Políticas Públicas y programas sociales”.
El experto hizo hincapié en cómo la Encuesta Casen, que mide la pobreza desde el consumo, no estaba reflejando la realidad país. Por eso valora que –con la entrada en vigencia del Registro Social de Hogares- se está empezando a analizar la pobreza desde una mirada multidimensional, que mide las privaciones en salud, vivienda, educación y trabajo.
“Es una visión más completa de la pobreza. La Casen no mide gastos, pero por ejemplo, en los adultos mayores los gastos están en salud. Y entre una y otra medición se pasó de 6,6% a 21,6% en los mayores de 60 años”, expresó Moreno.
Esta mirada más global ha ido dejando una serie de factores al descubierto y la profundidad del problema en algunos sectores de la sociedad, como es el caso de Atacama, que pasa de ser considerada una de las localidades más adineradas a la segunda más pobre después de la Araucanía.
“En nuestro país no hemos logrado mejorar la distribución del ingreso. La mayoría de los ingresos no se dan por la cantidad de terrenos que se poseen, sino por el tipo de trabajo que se ejerce. Es decir, el gran problema está en el terreno del trabajo. Un tercio del país está entrando y saliendo de la pobreza y eso es por la mala distribución”, añadió.
Sin embargo, el director de la Fundación lamenta que esta medición multidimensional que ahora opera no se esté utilizando correctamente. Y eso se debe a que el nuevo Registro Social de Hogares ocupa la lógica antigua y ahonda las diferencias ya existentes.
“Todos estos datos debieran llevarnos a una política social mejor. Tenemos los datos, pero no los estamos ocupando… Por ejemplo, la política en educación, en entrega de dineros, está focalizada en el individuo y poco en la familia o las comunidades. Es patético”, finalizó.