Especialistas desmitifican relación homosexualidad/ pedofilia
Aún resuenan los ecos de la discusión que desató el Secretario de Estado del Vaticano, cardenal Tarcisio Bertone, cuando de visita en Chile aseveró que “los abusos contra menores no tienen relación con el celibato sacerdotal, sino que ese tipo de conductas está relacionado con la homosexualidad”. Sus palabras relacionando homosexualidad con pedofilia no dejaron indiferente al mundo gay ni a la sociedad civil en su conjunto y quedaron flotando las preguntas respecto a los reales motivos de algunos personeros de la Santa Iglesia para hacer una aseveración que, según los expertos, carece de fundamento científico y biológico.
Loa anterior fue una de las motivaciones de un grupo de expertos para juntarse a debatir en el seminario “Homosexualidad y Pedofilia: ¿Una relación interesada? realizado por la escuela de Trabajo Social de la UAHC en conjunto con la Consultora Ciclos y el Movimiento de Liberación Homosexual, Movilh.
Para el presidente del Movimiento de Liberación Homosexual (Movilh), Rolando Jiménez, detrás de ese juicio hay una homofobia encubierta y una clara intención de esconder los reales motivos de los abusos sexuales en contra de menores. “Se intentó testear y sacar del foco de la discusión los abusos sexuales en que incurren sacerdotes y que han contado con una política de encubrimiento desde el Vaticano y las jerarquías locales. La idea fue sacar ese foco de atención y buscar otros culpables, citando estudios que nadie ha podido certificar que sean rigurosos. Se trata de una maniobra homofóbica y política de la peor calaña” afirma Jiménez.
Los únicos datos con los que cuenta la Iglesia Católica al respecto son los facilitados por el fiscal de la Congregación, Charles Scicluna, que contabiliza las denuncias de abusos del clero. En ellas se desprende que el 10% de los casos de abusos fueron de pederastia y el 90% casos de efebofilia, de los cuales el 60% se refiriere a individuos del mismo sexo y el 30% de carácter heterosexual.
Si bien no existen estadístas globales que desvinculen a los homosexuales de abusos, tampoco existen cifras que los vinculen. Es más, según el teólogo Álvaro Ramis, los abusos contra menores no son parte de un grupo de personas en particular, sino más bien son cometidos de igual forma tanto por quienes son heterosexuales como homosexuales,
“Es cabalmente conocida la actitud de la Iglesia Católica respecto a la homosexualidad. Se argumenta que es una conducta “antinatural” y condenable moralmente. Esta actitud tiene consecuencias legales y políticas graves, ya que impide el reconocimiento de los derechos de las personas homosexuales” sostuvo Ramis.
La psiquiatra Fanny Pollarolo sostuvo que estamos frente a una gravísima inconsistencia valórica, donde se olvida quienes son las víctimas y quienes los victimarios “se aplica la violencia de la discriminación; del denigrar y culpabilizar a minorías en su orientación sexual, y caemos en la violencia de desproteger al o los menores abusados, con el ocultamiento y la tolerancia hacia el abusador”.
Jeannette Hernández, asistente social de la UAHC, experta en temas de abusos sexuales, comparte este criterio y señala que no se debe perder el norte en este tema. “Debemos enfocarnos en quienes realmente son víctimas y quienes son sus victimarios, independientemente si son homosexuales o heterosexuales. Aatribuirles responsabilidad a la opción sexual es querer desviar la atención del flagelo”.
En Chile y según las cifras del Centro de Asistencia a Victimas de Agresiones Sexuales, C.A.V.A.S, el 89,4% de los menores son abusados por personas cercanas a su entorno y un 39,9% por sus propias familias. La mayoría de los menores abusados terminan con daños y presentan secuelas a largo plazo. La confianza es la herramienta clave de quienes cometen los abusos para acercarse a la víctima y, mayoritariamente, quienes lo cometen son personas normales, es decir, sin patologías psiquiátricas. La mayor parte corresponde a personas heterosexuales.
El psicólogo Miguel Morales, quien trabajó con abusadores en el Ministerio Público, sostiene que en los años que trabajó con hombres abusadores sólo tuvo dos casos de homosexuales. Considera que es inapropiado hacer la relación ya que se contradice con la realidad.