“Normalistas. Amor por la enseñanza”_Directora de la carrera de sociología evalúa influencia de las profesoras normalistas en trabajo documental
Para muchos son una especie en extinción, una antigua leyenda de la educación o sencillamente héroes anónimos del pasado. Los profesores normalistas son parte fundamental de una historia vapuleada como la educación chilena y protagonistas del documental “Normalistas. Amor por la enseñanza” que realiza el cineasta Sergio Arévalo sobre el tema. El largometraje incluyó en sus testimoniales la participación de la directora de la carrera de sociología de la Academia, Paulina Vidal.
La académica señala que lo que más la motivó a participar de esta producción fue el tema, ya que la educación es una de sus líneas de trabajo desde la sociología. Asegura que el trabajo de las profesoras normalistas es una experiencia que ha sido invisibilizada a lo largo del tiempo. “No hay una reconstrucción histórica de lo que ocurrió, ya que existió un período largo en la historia de Chile, desde el golpe de estado, en el que se perdió todo lo que significaba ser profesoras normalista. Ellas tenían una relación con la educación pública, gratuita, laica y de calidad en el que el aprender haciendo y el contacto con el estudiante era clave”, señala Vidal.
El registro de Arévalo, quiso, además de hacer un homenaje a sus padres (profesores normalistas en Ancud y Victoria), rendir un homenaje a todos los educadores normalistas formados en las más de veinte escuelas que existieron en todo Chile. “Durante el proceso de investigación descubrí que, por una parte, a todos quienes comenté sobre la idea de hacer este documental me manifestaron el interés de que un trabajo como este se realizara, porque sin conocer la historia en detalle, tenía una muy buena opinión sobre los normalistas, y muy relacionado con esta primera reacción, pude darme cuenta que a pesar de su trascendencia y de que el proceso del normalismo, abarca un período de mucho más de un siglo -de 1842 a 1974-, no existía ningún material audiovisual que tratara esta temática en profundidad”, sostiene.
Al rescate histórico de la educación
El director espera que, a través de esta obra, se abra un debate más amplio respecto a la necesidad de rescatar la rica historia del desarrollo de la educación chilena en manos de estas mujeres que fuero capaces de construir un sistema de educación público, gratuito y de calidad; “una senda que debemos retomar para construir las bases de un país más justo e integrado socialmente”, cree.
La profesora Paulina Vidal recomienda acercarse a “Normalistas. Amor por la enseñanza” desde un interés histórico y también social Al mismo tiempo agrega: “Me pareció interesante rescatar esa experiencia con normalistas de distintos lados que fueron entrevistadas. Encontré que era una linda experiencia que debían conocer los estudiantes de Sociología, pero también de las pedagogías y las ciencias sociales ya que es parte importante de la historia de Chile”.
-Desde su punto de vista, ¿Qué más se pierde cuando la formación normalista se trunca en 1973?
-A partir del golpe militar y la instalación del neo liberalismo, dejan de existir justamente las consignas que hoy conocemos, es decir, eso de “educación pública, gratuita y de calidad” antes eran reales. Cuando en el 2011 el movimiento estudiantil toma esa frase de lucha, de alguna forma está recogiendo esta historia que es la historia de las normalistas, que era la historia de una educación laica, que no pertenecía a ningún grupo económico, que era la educación que no tenía que ver con intereses mercantiles. Lo que primaba ahí era la relación con el estudiante y los procesos de aprendizaje con una idea de país y de construir nación.
-¿A qué público usted recomendaría este documental?
-A toda la universidad y a personas que se interesen por el tema de la educación que se interesen en además por cómo podemos recoger experiencias históricas para reconstruir la educación que en este país era muy importante. Es bueno recoger nuestra historia educativa y decir que los movimientos de ahora están en sintonía con lo que fue nuestra educación en Chile.