Psicólogo Pablo Grosz y sus ‘cuentos espontáneos’ visitan la Academia

Si bien a Grosz nunca le gustaron los cuentos espontáneos, un amigo le insiste que asista a un taller que se dictó sobre el tema. En un momento, la actividad del taller fue escribir un cuento a una persona… “y el cuento que me escribió una persona que estaba en el mismo taller me tocó una fibra tan intima… la verdad quedé muy impactado”.

La particularidad es que cada vez que el psicólogo escribía un cuento, por la razón que fuere, pasaba algo idéntico o muy similar a lo relatado.  Una vez  escribió un cuento a su hija, cuyo tema se desarrollaba en un país con una dictadura muy feroz y la protagonista –Jazmín- le enseña a una bandada de loros a gritar ‘muerte al dictador’, ‘vivan los pueblos libres’.  Al tiempo de haberlo escrito, ocurre el fenómeno denominado ‘Primavera árabe’.

Aunque piensa que este tipo de cosas son obra del azar, la formación de estos cuentos espontáneos “son producto del inconsciente, un acto fallido”,  pero recalcó el hecho que estos cuentos “no los pienso en ningún momento, como dice el nombre, nacen en forma espontánea”, agrega Grosz.

El expositor, además, ha trabajado con materias ligadas a la telepatía: “existe la comunicación instantánea. Nos dan chispazos de vez en cuando con los sueños telepáticos, entre otros”.

Sobre el uso de estos cuentos, el psicoanalista cuenta que “los incorporo como parte de un proceso no terapéutico, aunque los ocupé para una psicoterapia con buen resultado (…) lo uso de preferencia con gente que me conoce, más que para psicoterapia pero es muy apropiado para el uso con niños”.

Agrega que “es posible que haya algo de la psicomagia de Jodorowsky. Pero esto no es un invento mío: los cuentos están en el inconsciente y salen como un acto de sincronía. Y esto no se puede inventar, solo está”.