Antropólogos detallaron su trabajo con el pueblo Waorani de Ecuador

Ciara Frances Wirth y Luis Emilio Rojas detallaron la forma en la que se desenvuelven en la amazonia y su voluntad para recibir enseñanza intercultural y etnociencia.

El auditorio Salvador Allende de la Universidad Academia de Humanismo Cristiano contó con la presencia de los antropólogos Ciara Frances Wirth y Luis Emilio Rojas, quienes relataron su experiencia trabajando con el pueblo indígena ecuatoriano Waorani, en el marco de una nueva jornada del Seminario Permanente: Sociedad, Territorio y Medioambiente.

Los expertos revelaron que el pueblo no supera las 4 mil personas. Además, se disgregan en pequeñas comunidades y con bastante distancia en el bosque amazónico, ya que poseen 600 mil hectáreas, el pueblo originario que más terreno posee en esa nación.
“Hay mucha voluntad de hacer educación intercultural, pero en la práctica es difícil”, manifestó Wirth sobre una comunidad en la que han ido trabajando la etnociencia, pero enfocado en las necesidades y e intereses de las comunidades.

“El aprendizaje lo hacen a través de la experiencia. Como son cazadores, no dudan en revisar los animales por dentro para observar todo lo que tienen. Y los niños participan activamente en este proceso”, agregó.

“Ocupamos su rico conocimiento local con algo más de ciencia y también incluyendo la tecnología. Trabajamos con las cosas que les interesan, como los animales. Ahora estamos trabajando en una aplicación sonora de teléfono sobre animales. Porque si no saben leer, la idea es que escuchen el nombre, que ellos denominaron, y los sonidos”, expresó Rojas.

Los antropólogos aseguran que la tecnología que han introducido a la amazona no es nueva, ya que este pueble ha tenido contactos anteriormente. Es más, ellos buscan este contacto con el gobierno ecuatoriano por lo cual la educación no es forzada.

“Son bien nacionalistas y dicen que son los Waorani de Ecuador, lo remarcan. Ahora tienen una buena relación con el gobierno, son amigos, pero si tienen que pelear, lo hacen. E incluso, ocupan el miedo de la gente de la ciudad para conseguir cosas”, añadió Ciara Wirth.