Carta abierta: La salud mental como prioridad en tiempos de pandemia

Carta abierta: La salud mental como prioridad en tiempos de pandemia

Mediante un oficio y una carta, un grupo de diputados de oposición junto a diversas instituciones y organizaciones ligadas a la educación y la salud mental, solicitaron explicaciones al Gobierno en relación a un eventual recorte de presupuesto del programa Habilidades para la Vida (HPV), que previene y apoya psicosocialmente a las familias y escuelas más vulnerables.

Compartimos con ustedes la carta y los/las invitamos a difundirla.

 

Santiago, 08 de abril de 2020.-

 

Carta abierta

 

En las últimas semanas en nuestro país se han implementado diversas estrategias para prevenir el contagio del COVID-19 basándose en evidencia y experiencias internacionales. Sin embargo, los efectos psicosociales han sido escasamente abordados, a pesar de que es claro que la pandemia genera impactos significativos en salud mental, ya sea por las condiciones de encierro, la alteración de la vida cotidiana y la incertidumbre respecto al futuro.

Antes de las crisis de los últimos 6 meses, el estallido social y el COVID-19, Chile era uno de los países con peor salud mental en el mundo. Los niños y niñas menores de 6 años lideraban el ranking de problemas de salud mental y las y los estudiantes de 6 a 18 años tenían casi el doble de enfermedades mentales comparadas con las cifras internacionales. Esto es particularmente grave si atendemos a que la investigación en salud mental y crisis sociales muestra que la prevalencia de problemas de salud mental luego de una catástrofe aumenta de un 8 a un 50%.

Los estudios sobre efectos de las cuarentenas nos muestran un escenario similar, destacando la aparición de trastornos de estrés postraumático y trastornos del estado ánimo, la activación de sintomatología psicótica latente o la agudización de los problemas de consumo de drogas y alcohol, viéndose además en Chile, el aumento de la violencia intrafamiliar.

Por lo tanto, no podemos esperar a que esta situación aumente en su gravedad. Al igual que con las medidas de prevención del COVID-19, tenemos que impulsar una agenda de prevención y promoción que garantice los derechos a la salud mental y el bienestar consagrados por la Constitución.

La evidencia muestra la importancia de reforzar los dispositivos locales de salud, pues ellos permiten minimizar los impactos negativos de las crisis sanitarias y sociales, potenciando los recursos comunitarios existentes en los distintos territorios. En este contexto, programas como Habilidades para la vida (HPV) de la Junaeb, constituyen experiencias relevantes para la prevención temprana en salud mental, particularmente en espacio escolar. Se trata de una política pública con más de 20 años de trayectoria, que se ha consolidado como una respuesta efectiva para abordar los problemas de salud mental en las comunidades escolares más vulnerables. El HPV está presente en 185 comunas, 2.519 establecimientos educacionales y atiende a 705.102 estudiantes, 29.091 apoderados y 564.145 docentes. Ha sido un actor clave en el apoyo psicosocial a las familias más vulnerables en las diversas situaciones de crisis y emergencia que hemos enfrentado en los últimos años.

El programa HPV es reconocido internacionalmente como uno de los dispositivos de salud mental escolar más grande del mundo. Es un socio estratégico para el campo del desarrollo científico y tecnológico en políticas públicas de infancia y adolescencia del país, y uno de los programas públicos con mayor evidencia científica y cumplimiento de los estándares internacionales para servicios de salud mental. Este programa, constituye en consecuencia, una política exitosa que atiende a los estudiantes más pobres del país.

El programa HPV cuenta con 321 proyectos compuestos por 2.202 profesionales que durante esta crisis han adecuado las estrategias presenciales de intervención a una modalidad virtual y distancia. Esto ha permitido la continuidad del acompañamiento socioemocional a las comunidades educativas en el contexto de la actual crisis sanitaria. En algunas comunas, el HPV es uno de los pocos dispositivos estatales de apoyo disponible en materia de salud mental.
Las rebajas presupuestarias en ámbitos claves como educación y en partidas específicas, entre ella Junaeb, van en la dirección opuesta al cuidado integral de la salud individual y social, pues ponen en riesgo programas relevantes como HPV, que en este contexto se hacen más necesarios que nunca.

La prevención mediante el aislamiento y hábitos de higiene ha sido un imperativo para evitar la expansión de la pandemia. Hoy llamamos también a ocuparnos de los efectos no siempre visibles, pero en expansión, de esta pandemia en la salud mental de la población. Instamos al gobierno a incorporarla entre sus prioridades programáticas y presupuestarias, cuidando particularmente los programas que como el HPV, han velado por la salud mental de los chilenos y chilenas durante las crisis anteriores y a implementar medidas específicas que atiendan esta dimensión tan relevante en la vida de las personas.

Colegio de Profesores y Profesoras de Chile
Sociedad Interamericana de Psicología
Asociación Nacional de Psicología Educacional
Sociedad Chilena de Psicología Comunitaria
Sociedad Chilena de Psicología Clínica
Centro de Investigación para la Educación Inclusiva
Núcleo Mileno para Mejorar la Salud Mental de Adolescentes y Jóvenes (IMHAY)
Grupo de Trabajo Infancia y Juventud, Red Clacso-Chile
Equipo Psicosocial de Salud Mental Escolar, Universidad Academia de Humanismo Cristiano
Programa de Apoyo a la Convivencia Escolar PACES-PUCV
Escuela de Psicología, Universidad de Chile
Escuela de Psicología, Pontificia Universidad Católica de Valparaíso
Departamento de Psicología, Universidad de La Frontera
Escuela de Psicología, Universidad Católica del Norte
Escuela de Psicología, Universidad Academia Humanismo Cristiano
Revista de Psicología, Universidad de Chile
Revista Psicoperspectivas, Pontificia Universidad Católica de Valparaíso
Revista Castalia, Universidad Academia de Humanismo Cristiano