Cristóbal Torres, estudiante de Antropología y deportista olímpico_“La Academia tiene interés de intervenir en la sociedad en todo momento”

Foto: Emol

Cristóbal Torres, destacado deportista nacional y estudiante de Antropología de nuestra universidad, pasó a formar parte de la historia deportiva de Chile al obtener medalla de bronce para en los Juegos Panamericanos de Toronto 2015, en la especialidad de Grecorromana. Además de destacar en otros varios campeonatos a nivel nacional e internacional.

Cristóbal nos compartió su experiencia,  sus inicios en esta disciplina, las limitaciones de ser un deportista  de alto rendimiento en el país;  sus triunfos y proyecciones, y cómo es compatibilizar su pasión por la lucha olímpica y la antropología, una carrera que a su juicio es una herramienta social al servicio y beneficio de la sociedad, y la cual retoma este segundo semestre en nuestra casa de estudios, tras un breve receso producto de la alta demanda de su entrenamiento.

¿Cómo ha sido tu carrera deportiva desde que te iniciaste en la lucha?

Comencé mi carrera deportiva a los 15 años en un club que quedaba en el colegio Politécnico San Lorenzo en la comuna de San Joaquín, ahí conocí la Lucha Olímpica, un deporte que no era conocido. Antes de eso practicaba artes marciales, pero la Lucha Olímpica me cautivo y me enamoré de ella; fue un amor a primera vista. Me cambié al colegio San Lorenzo y comencé a entrenar por dos años hasta lograr el nivel competitivo de atleta de alto rendimiento.

A los 17 años, una vez que en el club me subieron a la selección de mayores y empecé a entrenar con distintos técnicos nacionales, salí campeón panamericano de cadetes en el Salvador, mi primer título internacional en el año 2008.

En el 2011 vuelvo a competir, pero no en juvenil sino en categoría adulto, salgo segundo en el sudamericano. Al año siguiente entro a la Academia a estudiar Antropología, para complementar mis estudios con la lucha. Ese primer año en la Universidad me fue bastante bien, porque podía compatibilizar el estudio con el deporte.

¿Cuándo comienzas a profesionalizarte en la Lucha Olímpica?

El 2013 llegan a Chile dos entrenadores desde Cuba, lo que provoca un vuelco en mi carrera deportiva. Empecé a profesionalizarme en la lucha, ahí uno se da cuenta, a través de este nuevo proceso, cómo es el deporte, adaptarse a un entrenamiento profesional de alto rendimiento. Al año siguiente se venía una competencia de alto nivel: los Juegos Odesur, que se realizaron en Santiago de Chile. Cambié de categoría de peso a 59 kilos, antes estaba en la categoría 55 kilos. En estos juegos quedé quinto.

¿Por qué elegiste estudiar antropología y por qué en la Academia?

Entré a la carrera de antropología porque para mí es una herramienta para entender muchas facetas de la vida, para entender la realidad, cómo se comporta el ser humano en sociedad, qué pasa con la inclusión social, con la falta de educación. Pero mi pasión es la lucha, es como alguien que ama la música y le gusta tocar el saxo. La antropología es para mí una herramienta social al servicio y beneficio de la sociedad,  y elegí la Academia por su historia política, porque es una universidad que tiene el interés de intervenir en la sociedad en todo momento.

¿Cómo complementarias ambas disciplinas?

Hoy estoy en un receso, como un año sabático. Retomo las clases el segundo semestre y complementaré mi tiempo con la lucha. Lo haré de manera paulatina, con una carga académica que me permita realizar ambas cosas. Para mí la antropología es la herramienta con la que quiero trabajar, a través de la antropología física, que es la que se acerca a la antropología del deporte, para ayudar en el rendimiento de los deportistas con estudios sobre el cuerpo.

Has expresado que el deporte no es solamente una recreación, sino un tipo de educación ¿cómo ves lo que pasa con el deporte en el país?

Lo más importante es incluir el deporte en los planes curriculares, en la formación de los niños y niñas de nuestro país, sobre todo en aquellos más vulnerables. El deporte en Chile no es tema, no es parte de la educación. El deporte genera identidad local, y Chile es un país que no tiene identidad deportiva en general, a excepción de los triunfos que logra la selección en el fútbol. El deporte entrega valores como voluntad, amistad, responsabilidad, autodisciplina y muchos otros; además, te deja la enseñanza de llevar una vida mejor, que es lo que no tenemos. En torno al deporte creamos comunidad.

En mi caso, en términos de financiamiento para desarrollar este deporte, sólo cuento con aportes de amigos y conocidos, no tengo auspicios de privados. El Estado otorga un bono para aquellos deportistas que en su disciplina obtienen buenos resultados. Pero este bono no tiene lógica, independiente de su monto, ya que no es imponible, con los cual quedamos fuera del sistema de salud y de una futura jubilación.

En Chile, las federaciones deportivas siempre se han visto involucradas en casos de corrupción, han desvinculado a muchas personas y deportistas, disolviéndose la federación de lucha. A los tres meses de la competencia, en el 2008, me tuve que cambiar de club, eso implicó estar tres años fuera del deporte y de competir y cumplir internacionalmente. Cambiarme de club me ayudó entrenar y mantenerme deportivamente. Al mismo tiempo, en este periodo me perdí la parte más importante en la formación de un luchador, esa etapa en que uno adquiere la base para después competir en categoría adulto y donde uno desarrolla todas las habilidades de un luchador.

Se necesita invertir para que los que vienen tengan la base para competir internacionalmente, comprometerse con regiones, donde se encuentran grandes promesas del deporte, porque lo que existe en las distintas localidades es ineficiente. Además, no existe un cuerpo técnico que prepare a los futuros deportistas.

¿Cuáles son tus metas a corto y medio plazo como deportista?

Quiero conseguir más triunfos, una medalla olímpica, exigirme al máximo para lograr y conseguir mis metas deportivas: Pero el triunfo no sólo es obtener trofeos, cuando te caes y te levantas con más fuerzas ese es el triunfo, saber sobreponerse a la adversidad, sobre todo en estos tiempos.

La dictadura cambió toda la estructura social y cultural en Chile, y tras el retorno a la democracia el Estado no invirtió en deporte, las inversiones están dirigidas al fútbol, a generar una imagen, pero no a la base del desarrollo que el deporte necesita.

A meses de los juegos Panamericanos de Toronto 2015,  en donde obtuvo medalla de bronce para Chile, Cristóbal se prepara para los sudamericanos, que se realizarán en noviembre próximo en Medellín, Colombia. Luego participará en Brasil, en la Copa Grand Prix, donde compiten luchadores de todas las categorías y de diversos lugares del mundo. Mientras que en el largo plazo espera participar en los Juegos Olímpicos y obtener una medalla para Chile.