Dirección de Desarrollo Académico inicia 2da versión del Programa Integral de Inclusión y Permanencia
En el marco del Programa Integral de Inclusión y Permanencia de la Dirección de Desarrollo Académico de nuestra universidad, 144 estudiantes fueron beneficiados con la Beca de Nivelación Académica de este año.
Se trata de una iniciativa financiada por fondos MECESUP, la cual se implementa por segundo año consecutivo y busca acompañar académica y psicosocialmente a estudiantes de las distintas facultades que ingresan a primer año a carreras de pregrado.
“Este programa tiene como elemento importante el aprendizaje y la justicia. Responde a cómo nos hacemos cargo de quienes ingresan a primer año de universidad y que tienen un espacio que construir y del cual apropiarse, para que desarrollen habilidades académicas que les permitan, desde su formación disciplinar, forjarse como personas y profesionales comprometidos con la sociedad. Asimismo, permite generar espacios de inclusión efectiva que signifique trabajar con los estudiantes directamente, entiendo todo lo que puedan ir desarrollando en su trayectoria académica”, señaló Stephany Vásquez, Coordinadora del Programa.
En este proceso los estudiantes estarán acompañados por tutores, 16 en total, quienes desde una formación multidisciplinaria, tendrán la tarea de guiarlos en su desarrollo académico y psicosocial en pos del desarrollo de su proyecto de vida universitaria. Cada uno tendrá a cargo a 9 estudiantes, con los cuales trabajará hasta el primer semestre de 2017.
Marcelo Garrido, Vicerrector Académico de nuestra universidad, junto con destacar el compromiso asumido por los profesionales que están detrás de esta iniciativa, felicitó y dio la bienvenida a los estudiantes.
“Damos la bienvenida a todos los estudiantes que se incorporan y que serán beneficiarios de este programa. Estamos comprometidos con el acompañamiento que ustedes van a necesitar para insertarse en el mundo universitario. Normalmente, cuando uno ingresa a la vida universitaria requiere de ciertos dispositivos que te permitan permanecer en las mejores condiciones para construir una trayectoria formativa lo mejor posible”.
Además, “quiero felicitar al equipo que impulsa esta iniciativa, por fortalecer la construcción de prácticas que permitan el efectivo reconocimiento de la diferencia y la diversidad a través de mecanismos de inclusión. Estos han sido compromisos que esta institución ha tenido desde sus orígenes, teniendo como principio la promoción de la justicia, basada en el reconocimiento y la promoción de los derechos humanos”, indicó.
Juan Marambio, Licenciado en Ciencia Política y Relaciones Internacionales de nuestra Universidad, es uno de los tutores que estarán a cargo de los estudiantes. Explica que el hecho de trabajar actualmente en la Academia, en el área de Admisión, y el espíritu que mueve a los distintos estamentos de la comunidad universitaria es lo que lo motivó para ser parte de este proceso.
“Mi motivación para ser tutor es darme cuenta que en los distintos estamentos hay un espíritu que no se encuentra en cualquier lado, una ventaja, un espacio que nosotros construimos desde lo humano, desde las distintas realidades y que no atañen a lo exclusivamente académico, nosotros hacemos universidad en cada momento, en los pasillos, en las calles, en los procesos de movilización y en el trabajo”.
Con esta experiencia espera “aportar bases sólidas en el ámbito académico y psicosocial, para que los estudiantes de primer año de la generación 2016 puedan desenvolverse de buena forma; y mejores herramientas en los cursos superiores, entendiendo los muchos escenarios que convergen en la universidad. En ese sentido, espero que mi rol como tutor sea bastante nutritivo y beneficioso para los estudiantes, y que puedan sacar todas las lecciones de este intercambio de saberes”.
Javier Guzmán de la carrera de Geografía, es uno de los beneficiados y reconoce que si bien le llamó la atención que este tipo de iniciativas se den en una universidad, se mostró optimista respecto a sus resultados. “Inicialmente me llamó mucho la atención este sistema, en otra instancia no me hubiera imaginado que me ayudarían de esta manera. Lo encuentro súper positivo, porque como salí el año pasado de cuarto medio estoy bastante desenchufado sobre el funcionamiento de la universidad y los tiempos de estudio. Y como es algo totalmente nuevo para mí no sabría qué esperar, pero de brazos abiertos a lo que venga, sé que terminará siendo algo positivo y será una experiencia muy beneficiosa”, indicó.
Una impresión similar tiene Javiera Lira, estudiante de primer año de Trabajo Social: “es una buena iniciativa, porque siento que podemos desarrollarnos más, tener un mejor nivel académico y social. Esto sin duda nos ayudará a ampliar nuestros conocimientos y desenvolvernos de mejor manera. Además de lo académico, también hay ayuda con materiales, fotocopias y apoyo con la carga del pase escolar (TNE), lo cual siempre es bienvenido”.
Precisamente, los estudiantes también contarán con apoyo de recursos tecnológico, transporte y material bibliográfico, y podrán acceder a la red de servicios con los que cuenta la Universidad: Centro de Atención Psicológica (Caps), Clínica Jurídica, Centro de Mediación Psicopedagógica Integral (Cempin) y con el apoyo de la Dirección de Asuntos Estudiantiles, Dirae.
Este programa comenzó a implementarse el año 2015, oportunidad en que fueron beneficiados 90 estudiantes de las distintas carreras de pregrado que imparte nuestra Universidad