En actividad que reunió a la universidad en pleno_Rector Álvaro Ramis da inicio a su período rectoral destacando valor público de la UAHC
Con una invitación a trabajar por un proceso de acreditación permanente, una agenda ambiental activa y a participar del próximo claustro; el rector Álvaro Ramis asumió su cargo ante la comunidad universitaria en pleno. La actividad, que tuvo lugar en el auditorio de la Fundación Cultural de Lo Prado, también fue motivo para recordar la misión de la Academia y la necesidad de mantener un rol reflexivo y crítico, singular y comprometido con la generación de valor público para la sociedad chilena.
La Ceremonia de Inicio del Período Rectoral 2019/2023 contó con palabras del vicerrector Fabián González, la recientemente electa decana de la Facultad de Ciencias Sociales, Gabriela González, además de números artísticos a cargo de la Facultad de Artes.
En su alocución, Fabián González recordó hitos recientes en la gestión de la Academia que reciben al nuevo rector con intereses en la continuidad, como por el ejemplo los exitosos procesos de acreditación, el acceso a la gratuidad, los desafíos de un curriculum innovado y otras exigencias. “Nuestro principales órganos de elección de las autoridades de la universidad han caracterizado estos procesos por su énfasis democrático y creemos que caracterizarán también la gestión del rector Ramis y sus desafíos”, estimó.
Por su parte, la decana Gabriela González partió destacando el incremento de la presencia de mujeres al interior de la universidad y los evidenció como insumo relevante para la colaboración en la construcción del proyecto universitario con nuevos bríos y enfoques distintos, pero comunes para los que invitó a trabajar colectivamente, señaló. “Una historia se construye con historia nueva y no sólo con recuerdos del pasado”, dijo realizando un paralelo con las luchas feministas históricas y las que vendrán como contexto de futuro para la facultad que dirige, la universidad y la sociedad.
El sentido y valor público
Finalmente, el rector Álvaro Ramis asumió su cargo ante la comunidad universitaria reflexionando sobre la excepcionalidad de la Academia y la singularidad de su génesis como refugio académico, su proyecto y modelo educativo innovador y democrático. “Sin embargo, aunque seamos singulares y excepcionales como institución existe sólo un criterio determinante dentro de nuestro ejercicio y que legitima nuestra existencia: el de producir valor público”, aseguró la autoridad.
Advirtió que ese valor público está inscrito en la importancia de la labor de sus egresados ante las necesidades sociales y es algo que describe la sociedad, quienes acuden a la universidad y la estiman. “La sociedad chilena ha optado por confiar en la Academia y bajo esa perspectiva declaramos formar graduados de excelencia y comprometidos con la promoción de los derechos humanos y la justicia social”, planteó sobre un ejercicio en el que cada cual debe plantearse la duda sobre cuáles son estas necesidades sociales o experiencias compartidas. Incluso, sumó algunas de estas motivaciones como eje de un ejercicio en el que el norte está puesto en el desarrollo conjunto de la universidad y su entorno.
Entre ellas la realización del Claustro “Educación no sexista y convivencia en la diferencia” que tendrá lugar el mes de octubre y que examinará el curriculum académico, abordará medidas de justicia social y de detección y erradicar conductas patriarcales de la comunidad universitaria; la preparación de la Cumbre COP 25 a través de una cuidada producción académica y de acción que haga de la Academia un referente en sustentabilidad; realizar un conjunto de acciones que, como durante todo el 2019, visibilicen la problemática migrante en conjunto con el Museo de la memoria y los DD.HH. a través de la muestra “El derecho humano a ser migrante” que sigan poniendo en valor el progreso y protagonismo político permanente de esta alianza; la conmemoración de los 50 años de la Unidad Popular el 2020 repensada desde las tres facultades de la universidad y, finalmente, hacer de los recurrentes procesos de acreditación una cultura permanente.
Para Ramis, estas acciones son propias de la Academia más crítica y acostumbrada a responder a las urgencias del país. “En tal sentido no debemos cambiar nuestra perspectiva, sino fortalecer la urgencia que tenemos hoy sobre el presente y el nuevo impulso de una universidad que mire hacia el futuro”, invitó.