En ámbito jurídico, educativo y salud mental_Servicios Comunitarios de la Academia siguen en acción durante la crisis sanitaria

En el contexto de crisis, los servicios sociales cobran una relevancia especial. Muchas veces invisibles en la normalidad, al momento de un peligro o una amenaza tan delicada como la pandemia que hoy padece el mundo, resulta trascendental este trabajo enfocado en quienes lo requieren. Personas mayores, personas que requieran atención psicológica o asesoría legal, lo cierto es que las crisis no miden clases sociales y sencillamente atacan y no siempre se está preparado. A todo se suman los incesantes bombardeos mediáticos, con cifras de muertos, contagiados y proyecciones varias. La pregunta es ¿cómo están realmente las personas?, ¿Cómo habitan? o ¿Cómo sobrellevan el problema?

Al respecto, los Servicios Comunitarios de la UAHC, que son gestionados a través de las respectivas Escuelas al que pertenecen, han estado permanentemente preocupados de la situación de algunos sectores de la sociedad que por cierto requieren atención en distintos aspectos.

Para Viviana Abarca, coordinadora del Centro de Intervención Social (CEIS), perteneciente a la Escuela de Trabajo Social de la UAHC, la situación que afecta al mundo y en particular al país, provocó un estado de vulnerabilidad general, el que ha afectado a toda la población, pero que en el caso de las personas mayores se agrava aún más. “Esto, considerando que han sido catalogados como “población de riesgo”, esto significa que se debiesen extremar los cuidados hacia ellos y ellas, para prevenir un posible contagio, pero muchas veces, sin las condiciones necesarias para hacerlo efectivo (soporte emocional, económico, social), todo lo cual se ve agravado por el precario sistema social que nos sostiene, donde salud, es por estos días, el más afectado. La presencia de pandemias como ésta, no hace más que visibilizar aún más la exclusión a la que todos y todas estamos expuestos”, argumenta la Asistente Social.

Abarca explica que al interior del CEIS, el principal desafío que se les ha presentado, es poder comunicarse de manera fluida, por lo tanto debieron realizar una serie de llamados para acceder al estado de las personas mayores con las cuales mantienen un vínculo permanente. “Muchas de las personas con las que veníamos trabajando, desconocen el uso de tecnologías para conectarse en vivo, o incluso, cómo manejar un celular para hacer una video llamada. Es por ello, que una de las primeras acciones que desarrollamos fue realizar una ronda de llamados telefónicos a representantes (todos mayores) de la red de observatorios para la prevención del abuso y el maltrato a las personas mayores, para saber su estado de salud general, los apoyos con los que están contando, y sobre todo, relevar las acciones que están llevando a cabo, muchas de ellas, asociadas al arte, la lectura y las manualidades”, sostiene.

La profesional del CEIS, explicó que tras ese levantamiento pudieron generar un estado de situación que ha permitido coordinar un trabajo en conjunto con la red de observatorios para la prevención del abuso y el maltrato a las personas mayores con el fin de rescatar posibles estados de vulnerabilidad, pero también generar motivación entre ellos.

Aislamiento social

Todo lo anterior ha tenido positivos resultados según comenta Viviana Abarca, puesto que durante las últimas horas se pudo establecer contactos virtuales con las personas.

“Nos sumamos a una conexión, vía Skype, donde pudimos vernos y compartir experiencias, miedos, inquietudes e ideas. Como red, nos propusimos seguir sumando personas en estos espacios virtuales, pues ellos mismos declaran que son fundamentales, para sentirse acompañados y contenidos entre pares, y al mismo tiempo, pensar en colectivo cómo se va enfrentando, tanto el cotidiano, como la incidencia en políticas públicas y medidas que se están tomando tanto a nivel local, como nacional”, indicó.

Finalmente, desde el CEIS comentan que toda esta situación de pandemia han podido darse cuenta en primera persona que el mal llamado “aislamiento social”, ha impactado fuertemente en personas mayores. El no poder salir y compartir ni siquiera con sus familiares y amistades, ha llevado a muchos/as a sentirse angustiados/as y solos/as.

“Nos dimos cuenta que esta contención, que nosotros llamamos social, debe ser encauzada relevando sus motivaciones, compartiendo relatos, historias de vida, recetas, puntos de tejer, música, escribiendo en conjunto, intercambiando puntos de vista, y que todo ello nos va transformando y nos ayuda también a pensar en el colectivo, en que realmente el aislamiento es físico, de allí la importancia, de seguir insistiendo en conectarnos virtualmente o por teléfono”, afirma la coordinadora de CEIS, y añade finalmente que la idea es avanzar hacia la conformación de redes intergeneracionales de apoyo, intercambio y colaboración, considerando además que los y las personas mayores tienen mucho que enseñar y compartir, puesto que muchas y muchos han pasado por guerras, pandemias, o situaciones de crisis que han sabido enfrentar y esto es una gran fortaleza que en estos tiempos se deben aprovechar.

Educación en cuarentena

Dentro del tiempo que le deja a la carrera de Pedagogía en Educación Diferencial los esfuerzos dedicados al inminente proceso de acreditación junto al Programa de 2ª Titulación en Educación Diferencial mención en Trastornos Específicos del Lenguaje Oral, el Centro de Mediación Psicopedagógica Integral, CEMPIN, alterna esa preparación con la contingencia que tiene en jaque a padres, apoderados y estudiantes de enseñanza diferencial que tratan de mantener el ritmo educativo en plena cuarentena.

El CEMPIN ha contactado a algunas de estas familias que asisten a este servicio comunitario y prepara material permanentemente para acompañar el aprendizaje con estrategias y metodologías domésticas, cuenta Caroline Contreras, la responsable de CEMPIN. Agrega que dentro de este material, hay muchos consejos y tips que hacen más llevadero y efectivo el encierro doméstico, pero que no necesariamente tienen que ver completamente con las clases y el aprendizaje, sino con la salud mental y el esparcimiento necesario para quienes pasarán largo tiempo encerrados en casa:

“La cuarentena también afecta por la falta de actividad física, por la convivencia forzada y otros elementos que recomendamos tener en cuenta en este período. En ese sentido, es importante mantener la rutina lo más fiel posible a lo que era la vida antes de la cuarentena, pero también a las labores del hogar que la familia tiene. Es decir, no levantarse tarde, realizar las labores de aseo y de autocuidado, medir el tiempo que se dedica a ver la TV y también tener cuidado con no excedernos con el consumo de noticias que puedan preocupar a los niños y niñas más pequeños/as”, señala la educadora.

Por otro lado, advierte de la importancia de dedicar un momento al día para conversar, escuchar a los niños, niñas y adolescentes para saber qué sienten y ordenarse en cuanto a las instrucciones del ministerio y las guías que envían del colegio. “Así, es más fácil ordenar también las horas de estudio y articular las horas de descanso… también para leer, poder distraerse y favorecer el juego libre que es una buena manera de integrar la lectura, la actividad física dentro del hogar”, cree Contreras.

Clínica jurídica: Más casos laborales

La Clínica Jurídica de la UAHC es otro de los servicios que se ofrecen a la comunidad. Se trata de una oficina de abogados de carácter formativo, que dispone de estudiantes de cursos avanzados y egresados, con supervisión de abogados y docentes, quienes prestan asesorías gratuitas a personas de escasos recursos o que tienen dificultad de acceso a estos servicios.

En esta instancia participan también  estudiantes de quinto año de la carrera de Derecho, apoyando las diversas problemáticas que puedan tener los vecinos de la comuna, particularmente en temas de pensiones, divorcios, alimentación u otras materias que los puedan afectar y que requieran alguna orientación legal.

Gonzalo Malagueño, coordinador de la Clinica Jurídica, señala que a pesar de que la Corte Suprema y la Corte de Apelaciones suspendieron el funcionamiento para tomar causas nuevas, las personas no han quedado desprotegidas respecto a las consultas que se venían realizando con antelación a la crisis sanitaria. “Lo que se esta haciendo es contestar vía correo electrónico las consultas que están haciendo las personas para poder judicializar distintas causas. Esto, debido que los tribunales están funcionando con turnos éticos y sólo para causas de urgencia. Incluso las audiencias programadas con anterioridad, fueron suspendidas hasta nuevo aviso mientras no se levante este estado de emergencia”, señala Malagueño.

El docente añade que además de los casos de familia que permanentemente llegan a la consulta, en estos últimos días se han incrementado las consultas de tipo laboral. “En general lo que se esta dando mucho es que la gente está consultando por temas relacionados con sus trabajos, como ¿cuál es la situación laboral en la que se podrían encontrar terminando la pandemia? o sobre ¿qué les podría pasar una vez que vuelvan a sus respectivas labores, tras el confinamiento. Ha existido un repunte también en las consultas relacionadas con imposiciones laborales y su precariedad respecto a la posibilidad que los vayan a despedir una vez que se terminen las medidas”.

El coordinador de la Clínica Jurídica, remarca  que lamentablemente a las personas que tienen premuras en el ámbito de familia por alimentos o por no pago, no podrán en lo inmediato ver avances en sus causas debido a la orden de la Corte Suprema de suspender momentáneamente el funcionamiento de los tribunales de justicia.  “Lo que seguiremos trabajando son las causas antiguas, puesto que se pueden seguir tramitando a través de la oficina virtual, por lo tanto las personas no estarán desprotegidas en ese sentido”, finaliza el abogado y docente de la UAHC.