En medio de auge de editoriales independientes_Diplomados UAHC en Gestión Editorial y Publicación Digital de Libros entregan herramientas para innovación de formatos literarios
Un catastro de la asociación Editores de Chile previo al estallido social cifraba un total de 355 librerías en todo el país. La mayor parte de ellas se concentran en la Región Metropolitana (184), Valparaíso (31) y Bío-Bío (25). Además, esa misma concentración está ligada a sectores urbanos y de nivel socioeconómico alto, lo que ya marcaba una brecha importante antes del brutal panorama de cierre del comercio y las librerías durante los meses de restricción de la pandemia. Si bien ya se registraba un avance sostenido de la venta online de libros desde hace 10 años, los lectores habituados a las compras en tiendas físicas asumieron la peor crisis posible del negocio editorial.
El profesor de Licenciatura en Lengua y Literatura de la Universidad Academia de Humanismo Cristiano, Pablo Lacroix, sostiene que el escenario también abrió una oportunidad para los nuevos formatos del libro, ya sea electrónico o el experimental de editoriales más pequeñas, así que el escenario aún no se ha analizado completamente. “La pandemia no generó un quiebre en el mundo del libro, provocó una adaptación de los formatos que se pueden dar con el delivery físico y virtual”, explica sobre el auge reciente de una oferta de libros descargables desde cualquier lugar del mundo evitando el costo de almacenaje, impresión y materiales.
Lacroix, también editor, explica que la producción experimental de libros tiene que ver con la experiencia de lanzar publicaciones en series pequeñas, a diferencia del trabajo serial en imprenta. “Es hacer un producto único que, si bien está repetido en 50, 100 o 200 copias, cada una posee un valor particular en cada detalle de su construcción. Desde cómo se va cosiendo el libro, cómo se van formando las capas, etc”, señala. En esa diferenciación de mercado y usuarios, nace también una democratización de los medios de producción literaria, señala el académico a cargo de los diplomados Gestión Editorial y Producción Experimental de libros y Edición y Publicación Digital de Libros en la UAHC.
Esta democratización de los medios de producción literaria lleva consigo desafíos similares a los que enfrentan otras formas de autogestión: que el artefacto cultural logre encontrar un público y no termine como venta de saldo o arrumbado en una bodega juntando polvo. “El marketing es un tema que se trabaja poco, algo que se deja para el final o se le dedica menos planificación. Ahí vimos que había un vacío y que era bueno tener una formación de experiencia tanto para gente que no sepa nada como para quienes ya estén inmersos en el proceso”, detalla Lacroix.
La editora independiente María Paz Morales, parte del grupo Editores de Chile, señala que, sólo en el último año, el grupo ha recibido a más de 30 nuevas editoriales en la organización. “No resulta extraño que, tras el estallido social, muchas editoriales hayan crecido en vez de morir y hayan aparecido algunas nuevas, porque se trata de plataformas donde puedes crear, publicar cosas que otras editoriales no van a considerar, sin censura ni limitantes en las formas. Estamos hablando de un boom de editoriales autogestionadas y pequeñas, entre las cuales hay algunas experimentales”, agrega Morales.
Morales dice que este auge explica el crecimiento y aparición de “ferias del libro especializadas” como “Impresionante”, que este año ofrece su quinta versión en el Persa Victor Manuel (Víctor Manuel 2220, Barrio Franklin) el 25 y 26 de septiembre y el 8, 9 y 10 de octubre. Eventos similares se realizarán en regiones. La Unión de Editoras Experimentales (UEE) organiza “Uña negra, encuentro de artes gráficas y oficios” en el Mercado Puerto de Valparaíso, los días 9 y 10 de de octubre y la “Grosa expo, festival de artes gráficas” se llevará a cabo el 26, 27 y 28 de noviembre en la plaza Santo Domingo de Chillán.
Libros digitales para lectores análogos
En este avance del libro electrónico, la aparición de dispositivos para su lectura y plataformas para la autoedición como Amazon, Wattpad o los clásicos blogs, la pandemia también tuvo un rol decisivo en la familiarización de los lectores con los nuevos formatos. Mientras, el gigante de las ventas de libros online Buscalibre, informa que el crecimiento de las ventas durante el último año de pandemia fue de un 82 por ciento a nivel latinoamericano. También la expansión de las editoriales pequeñas y autogestionadas, en cuánto a catálogo, autores y experiencias con el libro objeto, ha sumado a la lectura del confinamiento.
A diferencia de otros sectores que sólo pueden optar por una vía de producción, el mercado literario es uno de los raros casos donde varios formatos pueden convivir en relativa armonía y sin importar lo que dicten los gigantes de la industria, el futuro de los libros todavía yace en los bolsillos de sus verdaderos mecenas: los lectores. Para Claudia Burgueño, jefa de la carrera de Licenciatura en Lengua y Literatura de la Academia, los últimos años confirman que la crisis social y sanitaria dio paso a un proceso de adaptación del sector que aún está en marcha.
“Cuando bajaron las ventas por el cierre de las librerías las editoriales empezaron a readecuarse, a digitalizar sus títulos, a ofrecer compras por descargas o incluso sumar formatos digitales a la compra física y ofrecer despachos gratis”, señala la profesora de lingüística.
Constanza Valenzuela es fundadora de Viuda Negra Ediciones y docente del Diplomado en Edición y Publicación Digital de Libros en la UAHC. Desde su visión, la producción de libros electrónicos y el trabajo editorial independiente se ha transformado en una necesidad. “Muchas vías de difusión como la distribución en librerías, la participación en ferias y la organización de lanzamientos, se vieron truncadas y los editores tuvieron que ingeniárselas para seguir moviendo sus publicaciones en un contexto poco favorable”, destaca sobre la consolidación de este mercado en busca de mayor perfeccionamiento.
En tal sentido, la propuesta de los diplomados en Gestión Editorial y Producción Experimental de Libros y el de Edición y Publicación Digital de Libros que ofrece este semestre la Universidad Academia de Humanismo Cristiano (desde el 28 de septiembre y el 4 de octubre, respectivamente) están diseñadas desde este contexto de producción editorial a costos competitivos y alta calidad para personas involucradas en la industria del libro. “Ambos diplomados que no estaban en el mercado chileno de formación profesional universitaria, técnica o personal; se enfocan más que competir, en pensar en la formación del mercado editorial y qué elementos faltan en él”, sostiene el profesor Lacroix, quien es magíster en Edición y director editorial de los sellos Ajiaco y Laika Editora.
Parte del programa de estos diplomados considera formación teórica sobre la industria editorial, la diagramación de libros físicos, experimentales y digitales y temas específicos cómo la selección de los distintos papeles para su elaboración. También la postulación a fondos estatales y beneficios económicos y cómo insertar el libro en el mercado o en plataformas como Amazon y otras.