Encuentro Anual IPES_Estudiantes de Escuela de Geografía aportaron desde sus prácticas a gobiernos locales
Generar herramientas, conocimientos y encuentros desde el aprendizaje y el trabajo en terreno es uno de los principales desafíos de las prácticas progresivas que la Escuela de Geografía UAHC ha implementado como modelo formativo. Algunas de estas experiencias fueron presentadas por los estudiantes y comentadas por profesionales de los centros de prácticas en el Encuentro Anual IPES (Intervención+ Posibilidades + Espacios).
Desde el casco histórico patrimonial del puerto, Valparaíso Profundo es un espacio cultural que se ha propuesto vincular a las personas con las artes y la cultura. Durante el año 2020 fue uno de los centros de práctica donde los y las estudiantes de la Escuela de Geografía de la UAHC dieron cuenta de sus aprendizajes y aportar al trabajo que esta organización realiza. “Fue importante el trabajo que los estudiantes hicieron con nosotros. Creemos que el arte es un transformador de territorios y estamos en el desafío de instalar una mirada distinta de la instalada por la institucionalidad en Valparaíso. El desafío que les pusimos fue dar vuelta los típicos modelos de gestión territorial integrada. Les pedimos georreferenciar las subjetividades y no los espacios físicos. Las prácticas para nosotros son fundacionales, los aportes que hacen los y las estudiantes sirven mucho. Agradecemos que se nos considere como centro de práctica y que además nos hayan dejado instrumentos para desarrollar a futuro”, señaló Ricardo Ogalde, arquitecto integrante de Valparaíso Profundo.
La Directora de la Escuela de Geografía, Pilar González estima que el objetivo ha sido responder a la necesidad de articular de forma efectiva el conocimiento laboral con el proceso formativo. “Desde el año 2008 la universidad aplica este sistema a partir del segundo año, con un modelo que contempla seis categorías de análisis, cada una de ellas abordada en la modalidad de talleres y conducida por un docente responsable”, explica. Agrega que este modelo ha facilitado a estudiantes de la carrera una temprana vinculación con los ambientes profesionales, tanto públicos como privados.
La coordinadora de prácticas, Alejandra Díaz, añade que esta es también una modalidad que permite abrir el conocimiento que se produce en la universidad, “para que no quede solo en las aulas, sino que podamos proveer herramientas y encuentros de este aprendizaje que se construye en conjunto para nuestra sociedad”. Entre ellas, la elaboración de cartografías, bases de datos, sistemas de información geográfica y calificación del paisaje, entre otros aportes presentados y en los que “se observa un trabajo importante de la aplicación de herramientas, el aporte teórico práctico y resultados tangibles”, concluye Díaz.