Especial 40 años: Facultad de Artes recibe donación de libros del profesor Arturo Barría, detenido desaparecido durante la Dictadura
En un acto cargado de solemne simbolismo, el pasado 4 de septiembre, la Facultad de Artes de nuestra universidad oficializó la donación de una parte de la biblioteca personal de Arturo Barría Araneda, profesor de música, detenidos desaparecidos víctima de la dictadura militar.
El material bibliográfico completo inicialmente entregado a Olivia Concha, profesora universitaria cercana a la Escuela de Música, quien posteriormente decide entregarlo a tres universidades chilenas, entre ellas, la Academia, la Universidad de Chile y la Universidad de la Serena.
Aníbal Mardones, sobrino de Barría, agradeció el gesto de hacer partícipe a su familia de este momento en que la totalidad de los libros de su tío están a disposición de los estudiantes en una universidad como la Academia de Humanismo Cristiano.
“Arturo era hermano de mi madre, quien hasta sus 93 años de vida nunca dejó de buscarlo y sé que para ella, al igual que para mí y mi familia, constituye un profundo honor que esta muestra bibliográfica permanezca en esta casa de estudios para el uso de los estudiantes, realmente es un privilegio por lo que queremos agradecer a la Academia, sus profesores y estudiantes, ya que nos permiten dejar una huella en memoria de Arturo”, señaló Mardones.
Viviana Díaz, emblemática integrante de la Agrupación de Detenidos Desaparecidos y ex alumna del Liceo Darío Salas, asistió en representación de los estudiantes que conocieron la labor educativa de Arturo Barría, quien años más tarde se une con familia de su profesor en la Vicaría de la Solidaridad.
“A través de una fotografía yo me enteré de la detención y desaparición del profesor a dos años que ésta ocurriera, de ahí conocí a Estercita, su hermana, y recordé el profesor de música había dejado en mí, una honda huella, pues él era de aquellos que concitaba el respeto y cariño de todos los alumnos. Él era una persona, que al igual que mi padre y tantos compañeros formaron parte de nuestra sociedad y hasta el día de hoy no logramos encontrarlos, y cuando nos preguntamos qué pasó con ellos, uno siente que falta esa justicia tan importante para que esto nunca más vuelva a pasar en nuestro país, por lo que se reafirma el compromiso, que en mi caso personal, se asumió de por vida”.
En tanto Oscar Pino, jefe de carrera de Pedagogía en Música, y quien dirigió la ceremonia, recordó que la causa para detener a Arturo Barría fue haber participado en el funeral de un estudiante en el Liceo Darío Salas, donde supuestamente él, dos maestras y un alumno habrían cantado “La Internacional” y gritando consignas políticas, por lo que fueron citados a la Escuela de Suboficiales del Ejército. Hecho que, según las palabras de Pino, “en la condición de educador artístico que desempeñó Arturo y la facultad de artes, en el acto de enseñar, ser artistas y comunicar, de alguna forma se entrelazan con lo que fue el testimonio de la detención y desaparición del profesor, al entenderlo como un acto de amor por la profesión que en nuestro cotidiano debemos realizar en el espacio de trabajo y hacia los estudiantes”.