Estudiante de Doctorado presenta su libro “La Docencia Universitaria. Hacia una práctica pedagógica co-constructiva”
“Existe una falta de propuesta pedagógica para la formación de formadores”, estas fueron las palabras de Carmen Gloria Garrido, estudiante de Doctorado en nuestra universidad, al presentar su libro “La docencia universitaria. Hacia una práctica pedagógica co-constructiva”, el pasado 20 de noviembre en el auditorio Paulo Freire.
La presentación del texto, estuvo a cargo de Christian Larotonda, encargado de la Unidad de Desarrollo de la Docencia de nuestra universidad, y Ximena Azúa Ríos, quien actualmente se desempeña como encargada de la Autoevaluación y Acreditación de la Facultad de Ciencias en la Universidad de Chile. También participó la profesora Teresa Ríos, como directora de la Escuela de Posgrados.
El libro aborda, entre otras cosas, el problema que se está haciendo cada vez más agudo en las universidades y que dice relación con las formas de ejercer el rol de formadores dentro de las aulas académicas. Temas a reflexionar en el marco de las innovaciones curriculares de las universidades. Es por eso, que Ríos problematiza diciendo “si no se innova la docencia no hay innovación que sea válida, ni que legitime en la acción que es la práctica”.
Para la autora, el objetivo principal del libro es dar cuenta del problema que tiene la falta de propuestas pedagógicas para la formación de cualquier profesional de la universidad. “La universidad ha estado bastante pasiva en generar una visión más analítica en lo que sucede en la formación, los análisis han estado centrado en lo macro, no en la sala de clases”. En este sentido, el libro pretende lograr problematizar estos temas, generando una presión que lleve a los académicos y formadores tanto pedagógicos como profesionales a replantear una co-construcción en el área educacional.
Por otro lado, la Dra. Ximena Azúa, expuso la importancia de la participación interesada tanto de los profesores, como de los estudiantes para construir una educación en valores, donde tenga que ver no tan sólo sobre aprender técnicas, sino también a reflexionar de lo que se hace y cómo se hace. Para eso, invita a dialogar el sentido de una educación de calidad a nivel nacional. “Tenemos que ponernos de acuerdo entonces, por lo menos en cada institución, como una comunidad que aprende de sí misma, qué es para ustedes y para nosotros una educación de calidad, y lo que es central, que es la formación de sujeto, libre, reflexivo, con derechos y deberes” afirma.