Estudiantes de la Facultad de Artes participan del proceso de modernización de sus mallas curriculares
La presentación de las nuevas mallas curriculares de las carreras de la Facultad de Artes tuvo lugar en el Palacio Pereira donde autoridades y docentes de la Universidad Academia de Humanismo Cristiano compartieron las metodologías llevadas a cabo para materializar el proyecto de innovación curricular con un enfoque en diversos requerimientos profesionales, la creación, la participación y el aseguramiento de la calidad.
“La actualización fue un trabajo en conjunto que involucró a todas las jefaturas de carrera de la escuela, garantizando una visión integral y representativa de cada área. Más allá de la participación interna de la escuela, se dio especial importancia a la voz de los estudiantes y egresados. Sus comentarios y sugerencias fueron fundamentales para la configuración de las nuevas mallas, asegurando que los programas respondan a las experiencias y necesidades de quienes viven y han vivido la formación en artes escénicas”, señala Natalia Ruz, directora de la Dirección de Desarrollo Académico de la Universidad.
En la búsqueda de una mayor sintonía con el mundo laboral las asignaturas han sido actualizadas para reflejar las demandas del mercado y las tendencias actuales en las artes escénicas. Este enfoque práctico busca preparar a los estudiantes para los desafíos que enfrentarán una vez que se inserten en el campo profesional”, destaca Ruz. “La renovación curricular abarca diversas disciplinas, incluyendo teatro, cine, danza, diseño escénico y artes y oficios”, agrega.
Además, señala que a partir de 2025 se implementará un sistema de certificación de experiencias en las que los estudiantes recibirán certificaciones por las experiencias prácticas y los trabajos realizados en la comunidad y en equipos interdisciplinarios. Estas certificaciones intermedias -similares a las menciones que hasta la fecha solían entregarse al final de la carrera- reconocen formalmente las habilidades adquiridas por los jóvenes artistas y buscan valorizar su trabajo y experiencia con miras a facilitar su inserción laboral.
Otro punto clave de esta renovación curricular es la promoción del trabajo colaborativo e interdisciplinario entre estudiantes de diferentes carreras. Esta dinámica busca a través de asignaturas comunes estimular las condiciones reales de trabajo en el mundo de las artes, donde la colaboración entre diversas disciplinas es fundamental. Así, la iniciativa alentará la interacción entre músicos y actores, intérpretes con compositores o ceramistas junto a diseñadores en artes escénicas, por ejemplo.
En síntesis, Natalia Ruz destaca que los beneficios concretos para los estudiantes abarcan desde una malla formativa actualizada con las últimas tendencias creativas, una mayor flexibilidad para que el estudiante participe en la formación de su propio perfil de egreso y el desarrollo de competencias profesionales a partir de esta interacción dentro de un campus creativo. Un crecimiento profesional y artístico que contará con el reconocimiento formal de sus competencias y experiencias a través de certificaciones intermedias ancladas en la práctica artística y el foco territorial.