Estudiantes recuperan mural mosaico en homenaje a víctimas de la violencia estatal

La UAHC tiene su origen en un espacio académico que acogió a intelectuales y docentes que provenían de diversas universidades intervenidas desde el golpe de Estado de 1973. Eso marca su vocación y compromiso con los Derechos Humanos, que su comunidad universitaria valora y fortalece en cada una de las iniciativas que emprende. Por ello, son diversos los lugares que preservan la memoria en sus campus: el auditorio Salvador Allende, la sala Clodomiro Almeyda -que fue profesor de la UAHC-, el monolito en recuerdo a las y los trabajadores sociales de la U. de Chile víctimas de la dictadura -el campus Condell fue sede de la carrera de Trabajo social de la casa de Bello- y otras placas y espacios que rinden homenaje a docentes y momentos significativos de nuestra historia.

“Es muy relevante para nuestra Universidad preservar el mural mosaico de Condell que entrega un testimonio de todas las víctimas de violencia ocular, porque esta obra nace como parte del apoyo y solidaridad que recibimos cuando miembros de nuestra comunidad fueron violentamente atacados y sufrieron, como Gustavo Gatica, la represión en el contexto del 18-O”, dice el rector Álvaro Ramis.

Tras el ataque sufrido al mural -mosaico creado con el colectivo Mosaico Protesta, en homenaje a las víctimas del estallido social, en particular a los estudiantes de la Academia que perdieron sus ojos a causa de la violencia policial- un grupo de mujeres estudiantes de la carrera de Derecho trabajó durante la mañana de este lunes para recuperar el mural vandalizado.

“Es sumamente importante preservarlo, recuerda a estudiantes íconos del estallido, como Gustavo y Dante, y también Cristóbal, que quedó con perdigones en sus ojos. Nosotras, y como triestamentalidad y por nuestros compañeros que quedaron heridos y con ceguera total, teníamos que recuperar el mural que los representa a ellos y a todas las personas que se han visto afectadas por la violencia política”, explica Denisse Saavedra, estudiante de Derecho UAHC.

El mural es una intervención urbana realizada a partir de mosaicos que ocupa parte del frontis del campus Condell de la Academia. Fue diseñado por el colectivo Mosaico Protesta, con el apoyo de la Escuela de Trabajo Social, otros colectivos y mosaiquistas y levantado por la comunidad universitaria. Para su elaboración también se recibieron mosaicos desde Argentina proporcionados por el Colectivo Mosaico Urgente. La obra está compuesta por una serie de ojos que cubren el muro con diversas técnicas, aludiendo a un país que despertó y a otro que sufre los abusos y mutilaciones oculares desde el estallido.

“Nos pudimos dar cuenta que fue vandalizado desde la rabia, tuvieron tiempo para aplicar tres tipos de pintura y en capas. Fue algo planificado porque los ojos tenían tres capas de pintura. Luego de tres horas de trabajo lo recuperamos”, dice Denisse Saavedra.

El rector Ramis destaca la rápida reacción de las estudiantes “que pudieron recuperar este valioso mural que también fue fruto de la solidaridad de artistas argentinas que iniciaron el diseño de la obra y que luego fue realizada por el conjunto de docentes y estudiantes de la Universidad”.

“Nuestra comunidad fue muy afectada por la represión. Las y los estudiantes realizaron diversas iniciativas para rescatar la memoria y plasmar lo que sentían. La Universidad ha colaborado con los procesos de reparación y uno de sus actos fue la instalación de este mosaico. Lo positivo es que frente a su vandalización la reacción de la comunidad fue desde la reconstrucción. Esto también permitirá retomar acciones y actos que colaboren con la memoria”, señala Miguel Oyarzún, director de la Dirección de Asuntos Estudiantiles, DIRAE.

Durante esta jornada, diversas organizaciones de DDHH han condenado el ataque.