Experto analizó la nueva forma de mercantilización en la Gran Sabana

Experto analizó la nueva forma de mercantilización en la Gran Sabana

El especialista español, Luis Fernando Angosto, doctor en antropología del Departamento de Antropología y Estudios Latinoamericanos de la Facultad de Artes y Ciencias Sociales de la Universidad de Sydney, dictó conferencia sobre la acumulación moderna en el exótico territorio venezolano.

En el marco del “Seminario Permanente de Antropología Política”, organizado por la Escuela de Antropología de la Universidad Academia de Humanismo Cristiano, el experto español Luis Fernando Angosto, dictó la conferencia “Acumulación moderna: Nuevas formas de mercantilización y propiedad en la Gran Sabana, Venezuela”.

Se trata de un territorio mágico, pero a la vez bastante inhóspito para la vida en sociedad. Más de 3 millones de hectáreas donde reside el pueblo originario Pemón, y que en 1994 fue declarada Patrimonio de la Humanidad.

Una zona que la literatura y otras expresiones como el cine y el turismo han calificado como “de otro mundo”, pero que poco a poco está siendo atrapada por el modelo de reproducción del capitalismo.

Por eso, Angosto divide el concepto de acumulación moderna en tres partes: desposesión y explotación; fetichización; y conservador de mercancía.

“En la región hay muchos campamentos apostados al costado de la única carretera que existe y que son realizados por gente pemón. No hay títulos individuales de tierra, pero nadie te impide que te instales en un sector específico. Una iniciativa que en el mediano plazo te da propiedad permanente”, explica el doctor del Departamento de Antropología y Estudios Latinoamericanos de la Facultad de Artes y Ciencias Sociales de la Universidad de Sydney.

Una actitud capitalista que comunidades han empezado a adoptar, a pesar que aún no dependen de la economía venezolana, y así resguardarse de la exotización de la Gran Sabana que han realizado las clases sociales dominantes.

“Lo qué están haciendo es una defensa de sus tierras. Una resistencia ante la desposesión y donde han buscado mecanismos que se asimilan al capitalismo”, agregó Angosto sobre la fetichización de ciertos lugares específicos.

“Una cascada se presenta como un producto cultural de mi sector, de un trabajo cultural de los ancestros. Y de esta manera, los sujetos presentan su legitimidad ante el proceso de mercantilización… La cascada nunca antes había sido un punto de producción. Se convierten en conservador de mercancías, en conservar la producción de los ancestros”, finalizó.