Jefe de carrera de Geografía expone investigación en Universidad de Uppsala de Suecia
Marcelo Garrido, profesor y jefe de la carrera de Geografía de nuestra universidad fue recientemente invitado a participar en una de las sesiones del ciclo de seminarios organizado por el programa de doctorado en Geografía Humana de la Universidad de Uppsala, Suecia.
En la ocasión el docente compartió, con académicos y estudiantes de dicho programa, los resultados de la investigación Nº11100272 sobre “Reconocimiento del espacio escolar: Una mirada de casos, a los mecanismos legitimadores y anuladores de la experiencia espacial en Liceos del Gran Santiago”, que realiza con el apoyo de FONDECYT.
Dentro de los resultados Garrido destaca la idea de que los diversos actores educativos, al enunciar sus prácticas cotidianas, son capaces de reconocer un componente estrictamente espacial en sus experiencias escolares “Desplazamientos, movilidad, fijación del ser, lugar de habla, construcción del margen, y fortalecimiento de la frontera experiencial, son las prácticas espaciales más recurrentes en la vida escolar”, indicó.
En relación a lo anterior señala que “fue posible constatar la existencia de mecanismos explícitos e implícitos de identificación y reconocimiento de las prácticas espaciales. Los diversos actores: estudiantes, directivos y profesores, dan cuenta de la instalación de dichos mecanismos y de los diversos grados de legitimación que promueven”, explica Garrido
El docente señala y agrega que fue posible evidenciar la existencia de diversos mecanismos de reconocimiento de las prácticas espaciales diferenciales: valoración, filiación, apropiación y participación. Mientras la valoración y la filiación permitieron el reconocimiento de una espacialidad escolar referida a la constitución de lugares escolares; la apropiación y la participación permitieron el reconocimiento de una espacialidad referida a la constitución de territorios educativos.
“La espacialidad referida al lugar, tiende a ser menos explícita que la espacialidad referida al territorio. Lo anterior, se explica por el relativo control de la experiencia afectiva, filiativa y placentera que hace el sistema escolar. El desborde de la experiencia espacial, se hace entonces manifiesto físicamente, cuando se configura espacialidad desde la disputa del poder, la reacción al límite y el desencuentro de visiones totalizantes”, sostuvo Garrido.
En este sentido, el experto destaca “que los hallazgos indican que hay más posibilidades de constituirse identitariamente desde el escape al lugar que desde la restitución del territorio. Esto último, sobre todo, en estudiantes. Con todo ello, ha sido posible constatar la existencia de una “relativa” construcción de justicia social (ligada al reconocimiento y legitimación del otro espacial), en donde los actores tienden a ser tensionados por los múltiples escenarios normativos, los diversos encuadres identificatorios (constituyentes de lugar) y las divergentes capacidades de poder (constituyentes de territorio). Mientras el reconocimiento logra materializarse en prácticas espaciales efectivas, la legitimación opera como anulador de la fluidez del ser ahí”, puntualizó.
Además de presentar parte de los resultados de su investigación, Garrido asistió a la ceremonia del Professorinstallationen de la Universidad de Uppsala-Suecia, donde se nombró con el título de “Professor” (Catedrática) a la profesora chilena, avecindada en Suecia, Dra. Irene Molina Vega, quien ha colaborado de manera permanente como docente invitada en la carrera de Geografía de la Academia.
Las autoridades universitarias destacaron la excelencia que caracteriza el trabajo de la profesora Molina en Suecia, en vinculación directa con el compromiso socio-político que ella ha asumido para resolver los problemas de racismo y sexismo que orientan algunas prácticas urbanas en ese país nórdico.
Además, la profesora Irene Molina fue destacada de modo especial por ser la primera mujer que recibe una instalación de “Professor” en la cátedra de “Kulturgeografiska” desde fines de los años ’40 y de paso y por ser la primera mujer latina en recibir dicha posición en esa prestigiosa universidad que tiene más de 535 años de existencia.