La Academia conmemora el Día Internacional de la Mujer

“Conmemorar y no celebrar”,   esa fue la consigna con la que este año la universidad homenajeo a las mujeres. Y es que pese a los avances “la desigualdad de derechos, la discriminación y la violencia en todas sus formas siguen siendo aspectos pendientes”, enfatizó Mónica Fernández,  presidenta del Sindicato de Trabajadores.

En una ceremonia, encabezada por el rector José Bengoa y la vicerrectora académica, Loreto Hoecker, funcionarias y docentes no solo recordaron principales acontecimientos en torno a la reivindicación de los derechos de la mujer sino que también se deleitaron con la música de los profesores de la Facultad de Artes,  Sebastián Almarzar, tecladista y Felipe Rojas, baterista.

Bengoa, junto con extender su saludo, instó a la comunidad universitaria a estar atentos y vigilantes respecto al tema de la igualdad, el machismo y la discriminación en todas sus formas sobre todo al interior de nuestra universidad.

Por su parte, Loreto Hoecker, recordó los acontecimientos y luchas que se han dado en el país en favor del reconocimiento y respeto de los derechos de las mujeres, y entregó algunos datos sobre la inclusión femenina en ámbito académico.

Recogiendo algunos datos de un estudio de Paulina Vidal, socióloga de la Academia, elaborado junto a otros colegas,  Hoecker,  destacó que en dicha área a nivel global hay menos mujeres docentes y en cargos de dirección,  en lo cual podrían incidir las presiones que cumplen las mujeres en el hogar y con las exigencias académicas.

Una situación similar es la que se presenta con los académicos al interior de nuestra universidad, en donde la tasa masculina es notoria. Del total de docentes contratados, un 43% corresponde a mujeres y un 47% a hombres.

Respecto a los funcionarios, las mujeres son mayoría con un 60% y 40% hombres. Pese a ello, llama la atención que no sean precisamente las mujeres
quienes aprovechen los beneficios de estudios que les brinda la universidad.

En cuanto al ingreso de estudiantes a nuestro plantel,  ocurre algo similar a la realidad nacional, en donde  según los antecedentes del Consejo Nacional de Educación (CNED) la matrícula femenina creció en los últimos ocho años un 84%, a diferencia de los hombres, que ascendieron en un 53%.

En nuestra universidad ingresan más mujeres (56%) que hombres (44%). Sin embargo,  son estos últimos quienes desertan más que las mujeres (un 40 % v/s un 48%). Y cerca de un 10% más de mujeres egresan y más rápido que los hombres.

“Estas cifras implica realidades de género y también problemáticas específicas relevantes que convendría explorar dentro del esfuerzo que realizamos por constituir una comunidad más democrática,  justa y menos excluyente”, sostuvo Hoecker.