La política indígena en los municipios se toma el Seminario de Antropología Política.

La política indígena en los municipios se toma el Seminario de Antropología Política.

Fotos: Rosario Carmona, de Revista Rufián.

Fotos: Rosario Carmona, de Revista Rufián.

Con destacadas exposiciones relativas a las políticas municipales indígenas en la Región Metropolitana se desarrolló el II° Seminario de Antropología Política.

 

Con un breve resumen del primer encuentro, se dio comienzo a la actividad donde expusieron Carmen Araya, antropóloga y Magister de la U. de Chile y Jaime Román, antropólogo de nuestra Universidad y Magister en Políticas Públicas de la USACH.

La presentación de Araya, que actualmente trabaja en la Dirección de Bibliotecas, Archivos y Museos, se basó en un estudio de caso relacionado a la instalación de oficinas de asuntos indígenas en siete comunas de la región.

Esta exposición presentó cinco factores relativos a su funcionamiento: características de la política indígena (se reconoce que existen, facilitan acceso a los beneficios), el funcionario de estas oficinas (hay un “proceso de profesionalización” de las mismas), las cuentas (“debería establecerse una contraloría social como forma de que los mapuche exijan sus derechos), la participación (aún son espacios reducidos) y el reconocimiento (las personas tienen derecho a auto reconocerse y no necesitan un certificado).

Destaca además que la antropología tiene mucho que decir “podemos aportar mucho a la política pública en cómo esta llega al usuario”.

En tanto, la presentación de Jaime Román, partió presentando dos perspectivas: el alcance de la creación de las oficinas de asuntos indígenas (Román colaboró en la creación de una en Lo Prado) y las limitaciones de acuerdo a la “ingeniería estatal”.

Tras una cuenta histórica sobre los movimientos migrantes en la capital, comenta que las organizaciones mapuche logran se organizan para reproducir parte importante de sus costumbres y ritos. Aunque estas por un tiempo pasaron por un momento de invisibilización étnica, estas ahora son respetadas, a pesar que las primeras organizaciones nacen al alero de la iglesia.

 

Destaca además que hay un sistema ritual que se ha ido recuperando y aumentando con el tiempo. Pero propone que como elemento interesante de análisis ligado a la antropología sobre la mayoría femenina en la dirección de estas organizaciones, además, propone que la mayoría de estos nuevos dirigentes “ya viene fogueado por experiencias en otras esferas de la sociedad” además de resaltar que el We tripantu (Año Nuevo Mapuche) ha cobrado importancia como parte de la lógica de vida urbana del mapuche.