Osvaldo Núñez: “Es necesario en Chile que los adultos mayores también se asuman como un grupo de presión organizado”
Con alta asistencia de público este lunes 24 de marzo la Escuela de Periodismo en conjunto con la Casa de Amistad Chile Quebec, realizó la conferencia “Situación y desafíos de los adultos mayores en Chile y Canadá”. Exposición que estuvo a cargo de Osvaldo Núñez, abogado chileno exiliado, ex diputado federal de Canadá y actual presidente de la Asociación de Defensa de los Jubilados de Montreal.
En la oportunidad, Núñez realizó una amplia exposición de cómo el país del norte desarrolla su política estatal respecto a los adultos mayores, medidas ampliamente arraigadas y en constante desarrollo entre la sociedad civil, considerando que el 14.8% de la población pertenece al grupo etéreo sobre los 65 años de un total de 35 millones de habitantes.
Con ejemplos comparativos Núñez mostró cómo en ambos países se emplean direcciones de políticas públicas orientadas hacías similares dimensiones y de igual manera cómo los ciudadanos demandan las mismas mejoras en temas recurrentes como el sistemas de pensiones, falta de protección legal específica, atención médica, exclusión social, prejuicios y estereotipos, participación, entre otros. Demostrando que las grandes diferencias estarían dadas por los estándares de vida y además una sólida cultura organizativa por parte de la sociedad civil de los canadienses.
Respecto a lo anterior, el ex congresista hizo hincapié en una urgente capacidad de organización demandante por parte de los adultos mayores chilenos, de quienes expresó no debiesen seguir esperando que las municipalidades y el Estado dispongan de servicios y programas meramente recreativos o asistenciales, y menos, que políticas en materia de derechos se adopten sin que ellos participen del debate. Directrices que, según Núñez, la Asociación Quebequense ha promovido en su defensa por los derechos de los jubilados, experiencia que decidieron mostrar con esta visita al país, donde se reunirán con diversos actores.
“Es necesario en Chile que los adultos mayores también se asuman como un grupo de presión organizado”, insistió el abogado, quien también mostró cómo las organizaciones canadienses, apoyadas económicamente por este Estado, deben mantener un riguroso sistema de funcionamiento que contemple estructuras de trabajo y gestión a través, por ejemplo, de asambleas generales, consejos administrativos, comités temáticos, organización de cursos y seminarios, actas de estados financieros y representantes ante autoridades, lo que, según sus palabras, “ es base para validar en reconocimiento público”.
En cuanto a la situación en Chile, la cual ha sido monitoreada desde hace algún tiempo y ahora de manera más directa por la Asociación, Osvaldo Núñez valoró avances como la creación del Servicio Nacional del Adulto Mayor (Senama) en 2002 y la creación del Sistema de Pensiones Básicas, lo que hablaría de una sensibilización respecto a la amplia problemática de los adultos. No obstante, como ámbito central a resolver son las jubilaciones insuficientes de los chilenos, las cuales generan que los pensionados sean “los nuevos pobres de la sociedad”, recalcó el expositor.
En este sentido, una de las comparaciones más tajantes fue aquella referida al sistema público y privado de pensiones que poseen actualmente ambos países. En el caso de chileno, el sistema privado obligatorio de las AFP es el principal, el cual es desconocido en Canadá. Le sigue el porcentaje de quienes integran el Instituto de Previsión Social (ex INP), el 60% de los más pobres que son beneficiados con la pensiones solidaria de 80 mil y fracción, y quienes perciben regímenes políticos especiales o de las FF.AA y de Carabineros. A diferencia de Canadá, donde el sistema público que es el rector y donde el privado es solo complementario, ya sea a través de servicios otorgados por las propias empresas empleadoras o las ligadas al ahorro privado, también complementario.