Seminario aborda educación superior en Chile
En el marco de la presentación de resultados de un proyecto de investigación financiado por CONICYT – FONDECYT, el Programa Interdisciplinario de Investigaciones en Educación, PIIE, y la Universidad Academia de Humanismo Cristiano, con el patrocinio de las universidades USACH, UTEM y UCINF, organizaron el seminario “Educación Superior en Chile y perspectivas laborales de los egresados”.
La jornada contó con la presencia de investigadores y académicos del ámbito nacional e internacional, además de la participación de actores políticos y sociales vinculados al debate nacional en torno a la Educación Superior, quienes también abordaron los principales aspectos del sistema educativo nacional y de la reforma que impulsa el Gobierno.
Graciela Clotilde Riquelme, investigadora principal CONICET / IICE-PEET- FFyL U. Buenos Aires, Argentina, abordó el tema desde las “Múltiples demandas sociales, productivas y científico-tecnológicas a la educación superior”.
En ese sentido, dijo que “mientras más elevado sea el nivel en la universidad, le vamos a dar más herramientas a los estudiantes para defenderse en un mercado tan competitivo y difícil. La educabilidad no hay que ponerla en un sujeto sino en las herramientas”.
Agrega que “no es de los sujetos el concepto de empleabilidad, tiene que ver con docentes, currículo y otros factores diversos”.
Para Mario Morales, director de la Escuela de Psicología de la Universidad de Santiago, llama la atención el alto número de deserción que existe a nivel nacional, el cual alcanza un 30%. Un porcentaje similar se evidencia a nivel regional y una realidad distinta a la que muestra el sistema universitario de otros países del continente. Pero ¿por qué ocurre esto? ¿Cómo enfrentamos esta situación?”.
Para Morales, lo anterior tiene que ver con que muchas veces “la cultura de los estudiantes no tiene que ver con la de una universidad y chocan. Esto es de gran relevancia, por eso el apoyo psicosocial es fundamental, así como un acompañamiento integral”. Para el académico, vale preguntarse si el sistema está preparado para educar a jóvenes.
El contexto del sistema educacional en el país, los avances y retrocesos, así como una evaluación de la actual reforma que impulsa el Gobierno y su financiamiento, fue el tema que abordó Paulina Vidal, investigadora responsable del NTI Educación de la Escuela de Sociología de nuestra universidad.
“El proyecto tiene una característica que es medio esquizofrénica, ya que hace un diagnóstico acertado, pero la respuesta a ese diagnóstico no corresponde, sobre todo lo que se refiere a calidad. Tampoco deja claro cuál es su real sentido. Una reforma debe pasar de una lógica de asistencialismo a una garante de derechos”.
Según explica Vidal ” los gobiernos de la Concertación tuvieron la gran oportunidad de retomar lo mejor de la educación, rescatando la concepción de lo público”, evidenciando que actualmente existe una fractura entre lo público y lo estatal.
Para Giorgio Jackson, Diputado de Revolución Democrática e integrante de la Comisión de Educación de la cámara baja, el proyecto “tiene muchas buenas intenciones, pero que en la práctica son letra muerta”.
Una iniciativa de esta índole, sostiene, debe repercutir en un pacto social “que debe logre alinear a los diferentes sectores para que haya un propósito en común; de lo contrario, una gran oportunidad como esta quedará solo en las buenas intenciones”.
Del mismo modo, considera que la autonomía y gobernanza son aspectos fundamentales: “Es urgente que las entidades puedan desafiar lo establecido y no depender de un gobierno de turno”. Asimismo, y en materia de financiamiento de la educación, se inclina por una carga de impuestos para acceder a la gratuidad. “Hagamos una lógica de financiamiento a través de una carga a los impuestos, una especie de contribución”, indicó.