Seminario Interdisciplinario Movimiento Social de Pobladores y Ciudad-anía en Chile

Seminario Interdisciplinario Movimiento Social de Pobladores y Ciudad-anía en Chile

Con una alta convocatoria, este martes 15 de abril, se realizó el Seminario Interdisciplinario “Movimiento Social de Pobladores y ciudad-anía en Chile”, reflexión organizada en el marco del Núcleo Temático de Investigación (NTI)  Historia de la Población Che Guevara en el Santiago de la Unidad Popular, 1970-1973, de la carrera de Pedagogía en Historia.

Participaron de la jornada Mario Garcés, Dr. en Historia Pontificia Universidad Católica de Chile; Emanuel Gannotti, Dr. en urbanismo, Universita Luav di Venezia de Italia; Alexis Cortés, Dr. en Sociología, Universidad do Estado do Río de Janeiro, Brasil y Boris Cofré, profesor de  la Academia y (c ) Dr. en Historia, Pontificia Universidad Católica de Chile, quienes mediante una dinámica de reflexión con la audiencia analizaron desde la historia, la sociología y el urbanismo, dimensiones como la identidad, memoria y participación ciudadana, implicadas en los movimientos sociales chilenos durante la época en cuestión.

Para abrir el debate, Alexis Cortés,  se refirió a lo problemático que resulta definir a los pobladores solo por una de las dimensiones que los constituye: la lucha por la obtención de una casa. En contraposición,  el sociólogo planteó la perspectiva que surge a finales de los 90´, respecto a que “el derecho a la vivienda es derecho a la ciudad”, elementos más espaciales que sitúan a “los pobladores como conductores de la ciudad”. Otra dimensión sería la autodefinición por parte los propios pobladores, lo que refleja que dichos movimientos tienen la capacidad de presentarse en el espacio público porque “no poseen  una demanda particularista centrada en la vivienda”.

Por su parte, el historiador Mario Garcés, hizo hincapié en el proceso desarrollado entre 1952 y 1973, ciclo de interacciones entre el Estado y los movimientos sociales,  generado por “las promesas incumplidas (…) Si el Estado no construye, construimos nosotros”, definición clave de los movimientos en América Latina, entendidos no como dependientes del Estado, sino que dependen de la propia capacidad organizativa y presionan a los gobiernos para la obtención de la vivienda.

Aquello se observaría en Chile con el surgimiento del componente institucional, reflejado, por ejemplo, en la creación del Ministerio de la Vivienda y Urbanismo en 1965, que se ve superado por la demanda de viviendas produciéndose en 1967 con la emblemática toma  de  “La Victoria”, hecho que a su vez  cambia el escenario para los pobladores “se podría decir que el surgimiento institucional lo produjo el movimiento y la detención del movimiento la institucionalidad”, sostuvo el historiador.

En cuanto al proceso de Unidad Popular, Garcés señaló que sería difícil entenderlo como algo meramente estatal. La novedad estaría en que “la lucha es también poblacional y no solo obrera”, registrándose entre 1970 y 1973 el mayor movimiento con grandes cantidades de tomas en Concepción, Valparaíso y Santiago, y un gobierno que responde con la mayor construcción de poblaciones hasta la fecha”, sostuvo el académico.

Por su parte,  Boris Cofré, profesor que dirigió la investigación realizada por el NTI en la población Santa Anita, ex Che Guevara, señaló que desde el punto de utilidad para la Escuela de Pedagogía en Historia, esta investigación muestra la necesidad de  enseñar  a los jóvenes secundarios  la historia de sus barrios. “mostrar a las nuevas generaciones el protagonismo popular como productor de identidad y noción de capacidad, permitiría a los estudiantes entender que su población tiene una historia, que sus abuelos tienen una historia, por lo tanto, su barrio ya no es algo ajeno, sino que propio, lo que significa una cierta responsabilidad con el presente y el futuro, lo que pondría al estudiante en una buena disposición para el aprendizaje”.

Por último Emanuel Gannotti, Dr. en urbanismo, compartió la idea de que los pobladores son acompañados por otros actores y desde la perspectiva urbanística el objetivo era lograr tener un sitio que fuera institucionalizado, o sea, reconocido,  tendencia que se ve entre los pobladores y también la institución. Tomando  como ejemplo la tragedia ocurrida en Valparaíso, se refirió a la dinámica de creación de los barrios, donde los habitantes ponen sobre la mesa las vías de solución para sus problemas habitacionales,  proceso poblador-Estado,   estabilizador de ambos grupos,   donde evidentemente “en la actualidad existe la  necesidad de una mirada más a largo plazo.No se trata solo de urbanizar un sitio”, sostuvo.