Sobre Ley de Inclusión_Mª Alejandra Benavides: “La convivencia es tarea de toda la comunidad. Tenemos que perder los miedos y entregar la participación, deberes y derechos a los estudiantes”

Sobre Ley de Inclusión_Mª Alejandra Benavides: “La convivencia es tarea de toda la comunidad. Tenemos que perder los miedos y entregar la participación, deberes y derechos a los estudiantes”

La Facultad de Pedagogía inauguró su año académico con un conversatorio ampliado en torno a una política pública que se ha vuelto controversial a propósito de la Ley de Inclusión que comenzó a regir desde el 1 de marzo del presente año: ¿Cómo la Ley de Inclusión transforma las prácticas pedagógicas?. Para dar cuenta de dicha interrogante se convocó a Cynthia Duk, académica de la Universidad Central; María Alejandra Benavides, directora de la Escuela Su Santidad Juan XXIII, de La Legua; y Alexis Chelme, director de la Escuela de Pedagogía en Educación Básica de nuestra Universidad.

Durante la jornada se destacó que en función de los proyectos educativos,  los colegios seguirán teniendo libertad para establecer y llevar a cabo sus propios proyectos.

“Esta Ley de Inclusión permitirá la mixtura, que se abran las escuelas y se exige cumplir además con el derecho que todos los niños y niñas tienen en la educación. Esta Ley alude a una serie de orientaciones a los establecimientos para abordar la diversidad. En definitiva, lo que nos pide es repensar la educación desde la escuela, y que pone en el centro del trabajo la formación ciudadana, entonces, desde ahí muchos elementos actuales de los establecimientos se transforman para que sean coherentes en lo que se está planteando”, declara Cynthia Duk, académica de la Universidad Central.

La Ley de Inclusión quiere asegurar un tránsito estable al nuevo sistema, por tanto, la implementación de muchas de sus normas es gradual, otorgando un mayor plazo para su aplicación. No obstante, para la académica “la Ley de Inclusión promulgada, es la transformación más importante de la reforma educacional que estamos viviendo. Porque es la Ley que va al fondo del problema en la educación que es el trabajo en la diversidad. Sin embargo, para ello, necesitamos profesores con otras competencias, preparados para trabajar en diversidad, para proyectar en distintas esferas su labor profesional. La problemática radica en que los estudiantes de pedagogía salen de la universidad con la escuela estereotipada, y eso es grave en los tiempos que estamos viviendo. Es decir, cómo garantizamos la igualdad de derecho pero al mismo tiempo reconocer las diferencias en diversidad”, acotó.

Lo cierto es que desde la mirada de los profesionales la Ley debiera avanzar en un cambio en las prácticas pedagógicas, considerando que los colegios no podrán discriminar arbitrariamente a sus estudiantes por razones socioeconómicas, situación familiar, proyecto educativo, religión, entre otros.

En ese plano, María Alejandra Benavides, directora de la Escuela Su Santidad Juan XXIII de La Legua, manifiesta que “uno de los tantos problemas a los cuales nos vemos afectados y tenemos que cambiar, es que todo aquello que está pensado como normativa es desde el mundo de los adultos, de los profesores y no desde los chiquillos. En ese plano la convivencia escolar y su normativa es tarea de toda la comunidad, y para ello los adultos tenemos que perder los miedos y entregar la participación, los deberes y derechos a los estudiantes”.

En ese sentido dijo que “pensamos nuestras relaciones desde la sanción, y ¿Qué es la sanción?. Es todo aquello que no debemos hacer, pero eso no nos lleva a un estudiante reflexivo y que piense. El estudiante reflexiona, por tanto es imperioso hacerlos parte de esta participación, porque cuando se toman acuerdos entre todos mejora la convivencia y deja de ser punitivo, y avanzamos también en formación ciudadana”, concluyó.

En tanto,  el director de la Escuela de Pedagogía en Educación Básica de nuestra casa de estudio Alexis Chelme no tiene claro que la escuela pueda estar preparada para este cambio “en ese punto, por ejemplo, el concepto de diversidad hay que tensionarlo mucho, porque son muchos los desafíos que tendríamos que sortear. No sé si todos los profesores tienen ganas de inclusión. Hay escuelas y colegios que no creen en la inclusión. Además los estudiantes no quieren ir a la escuela porque los retan o no les gustan las reglas que en ella se imparten. Pero se debe entender que la inclusión y este nuevo modelo somos todos. La escuela está llamada a experimentar, a explorar. La escuela es un espacio que hay que transformarlo de nuevo, y nuestra Universidad es un espacio por donde debe comenzar la transformación, un espacio de discusión,  para después comenzar a entender lo que significa la inclusión”, sentenció.

En el contexto de la Reforma Educacional, la Ley de Inclusión se refiere a normas y principios para criterios de adecuación curricular, oportunidades de acceso, participación y progreso a todos los estudiantes. Toma como referencia las bases curriculares y la posibilidad de flexibilizar las respuestas educativas centrando la atención en las diferencias y las características individuales de cada uno de los estudiantes.

Nota: Patricio Zárate